sábado, 25 de octubre de 2014

Magnífica vista panorámica de la Villa de Rodeo del Medio, fundada por el teniente General Rufino Ortega.(Foto año 1922) Mendoza




Llegada de Inmigrantes a Argentina en el año 1899.

La razón del porque la afluencia de inmigrantes crecía mucho hacia el año 1899, era que en países como Italia, España, Francia escaseaba el trabajo agrícola. Era un cuadro colorido y curioso la llegada al puerto de inmigrantes. Diariamente los empleados del Departamento General de Inmigración subían a los barcos que traía a los Europeos de tercera clase y los clasificaban según se acojan o no a los beneficios de la ley nacional.














Fuente: Revista Caras y Caretas (1899)


Edificio de la Legislatura de la Provincia de Mendoza (foto año 1920)

Edificio ubicado en la intersección de calles Patricias Mendocinas y Peatonal Sarmiento, frente a la Plaza Independencia.



Perfumes para ocultar, seducir y matar

Su historia se remonta a los albores de la cultura. Concebido para honrar a la divinidad pasó luego a ser usado para disimular los malos olores corporales y para despertar ardientes pasiones. Sufrió la censura, el robo de fórmulas y la tradición. Es uno de los pilares de la industria cosmética y un arma amatoria.

Liz Taylor en una publicidad de perfume.

Los perfumes no tienen principio. Aunque han acompañado a hombres y mujeres, tanto en el cuidado personal como en el ámbito social, desde que alguien hace miles de años cortó una flor o quemó una bolita de incienso en un rústico recipiente, su historia se pierde en la noche de los tiempos. 


Antes de la aparición de los perfumes tal como los conocemos ahora se usaban simplemente sustancias aromáticas puestas en un pequeño caldero; su humo fragante impregnaba la piel y los vestidos de las personas al inundar con su tenue olor las habitaciones por las que transitaban o los lugares a los que concurrían. De hecho, si vamos a la etimología de esta palabra mágica, vemos que proviene del latín en la que per significa por y fumare, humo.

Las esencias aromáticas más usadas en la antigüedad eran la mirra, el benjuí, el estoraque, el ámbar, el incienso, la resina de terebinto, el gálbano, el ládano y el almizcle. En toda Asia Occidental y en la cuenca del Mediterráneo era generalizado el uso de perfumes tanto en ceremonias religiosas como en el ámbito doméstico. 

Aún hoy persiste la costumbre en el uso de botafumeiros o “echachumos” que se pueden ver en las celebraciones de algunas iglesias o en ocasión de actos religiosos especiales como procesiones. Esta costumbre tiene un doble significado, ya que representa un símbolo de pureza, de la purificación humana y es, al mismo tiempo, un tributo a la divinidad, ya que el tenue humo perfumado subiendo al cielo lleva en sí misma una ofrenda al ser superior que, halagado, concederá su protección. 

Y entre nosotros, quién no tiene en su casa un incensario para encender de vez en cuando o un calderillo en el que un aceite aromático se evapora lentamente al calor de una pequeña llama que perfuma el ambiente y nos pone de buen humor.

Por los restos arqueológicos, los especialistas deducen que fue la refinada cultura sumeria la primera en desarrollar los ungüentos y perfumes, dando origen a lo que sería la industria cosmética. Los egipcios tomaron las ideas básicas de la elaboración de perfumes y la perfeccionaron.
Los griegos creían que los aromas eran un regalo de los dioses y para conservarlos crearon bellos frascos de cerámica, entre los cuales destaca el esbelto y popular lekytos que aún hace las delicias de los turistas y sirve de inspiración a los grandes diseñadores de los emporios del perfume.
Como una vaporosa nube, los perfumes llegaron a Roma y a Bizancio donde su uso se extendió y alcanzó extremos curiosos. Por ejemplo, las damas romanas, muy higiénicas ellas, hacían que sus esclavas se llenaran la boca de perfume y se los rociaran o escupieran por todo el cuerpo. 


A pesar de la condena de la Iglesia Católica sobre el uso de las esencias líquidas para el arreglo personal porque inducía, cuándo no, al pecado, la influencia de la sofisticada cultura árabe permitió que este elemento esencial de la coquetería se popularizara en la Europa medieval. Y fue un árabe llamado Albucaste quien perfeccionó el destilado del alcohol sirviéndose de alambiques para realizar los primeros experimentos con la maceración de las flores; a este proceso le agregó un poco de alcohol, logrando que fuera el gran soporte de las esencias e desarrolló el perfume en forma líquida.

El procedimiento era sencillo y tuvo cientos de imitadores quienes fueron creando una de las industrias más lucrativas de la historia. Los mercaderes de perfumes iban de posada en posada y de castillo en castillo ofreciendo sus productos a las damas en un recipiente en forma de manzana que se hizo rápidamente popular, pues como se bañaban muy poco, se pasaban un trapito perfumado en las axilas y entre las piernas para oler  mejor. 

Fue la italiana Catalina de Médici, esposa de Enrique II de Francia y “mecenas” de Nostradamus, quien introdujo los perfumes en ese país porque no podía soportar el olor corporal de los galantes cortesanos y cortesanas. Mientras más fuerte era el perfume que usaban los habituales de la corte, más contenta estaba la reina. Catalina, además impuso el corset, el estilo de montar a lo amazona y de paso hizo que los caballeros y damas se bañaran más, aunque no tuvo mucho éxito porque uno de sus descendientes, Enrique IV de Francia no se bañaba ni perfumaba jamás, tanto que su esposa y sus amantes se desmayaban y vomitaban por el olor nauseabundo del rey. Un real asco. 

Cuando se puso de moda que los guantes también estuvieran perfumados, los guanteros se vieron en la necesidad de producir aceites olorosos que no dañaran las telas de sus delicadas confecciones. Por ello cultivaron en sus tierras naranjos, lavanda, jazmines, y sobre todo, rosas: así inventaron la famosa eau de toilette. Quizá el uso más extraño que tuvieron los perfumes es que también se usaron para lavarse los dientes. 

La famosa agua de colonia es la versión de Jean- Marie Farina, una monja francesa que mejoró la receta del árabe Albucaste y se la vendió a los perfumistas alemanes de la ciudad de Colonia. Por eso, cuando una mujer o un hombre elige hoy un sofisticado perfume y lo contrasta en el piel es interesante que recuerde las palabras de Jean-Baptiste Grenuille, el protagonista de El perfume, la novela de Patrick Süskind: “Y una vez en su interior, el perfume iba directamente al corazón y allí decidía de modo categórico entre inclinación y desprecio, aversión y atracción, amor y odio. Quien dominaba los olores, dominaba el corazón de los hombres”.

Patricia Rodón


Fuente: http://www.mdzol.com/nota/299709


viernes, 24 de octubre de 2014

Últimos Trabajos en la Casa de Gobierno de la Provincia de Mendoza. Inaugurada en el año 1951


Construida durante el 
peronismo, forma parte del Barrio Cívico de Mendoza 
El 12 de junio de 1948 el Gobierno Provincial anunció al público el proyecto del Barrio Cívico en el predio de la vieja Quinta Agronómica. Se decidió darle prioridad a los edificios de Palacio de Justicia y Casa de Gobierno, por cuestiones de urgencia y necesidad, pero finalmente serían las dos únicas componentes del proyecto que se concretaron. Entre los edificios nunca construidos se cuentan la Legislatura, el Archivo de la Provincia, Oficinas Nacionales, la Residencia del Gobernador, la Sala de la Bandera del Ejército de los Andes, entre otras. Desvirtuando luego el proyecto original, se construirían en las siguientes décadas la Municipalidad de Mendoza, los Tribunales Federales, la Escuela de Bellas Artes y el Colegio Nacional, la Jefatura de Policía, la sede de Vialidad Nacional, el Centro de Prensa para el Mundial '78 (hoy Centro de Congresos “Emilio Civit”) y su Auditorio “Ángel Bustelo”. La obra de la Casa de Gobierno comenzó rápidamente y el ala este del edificio fue inaugurada en 1951, mudándose la oficina del Gobernador a esta porción del edificio. Las alas central y oeste se demoraron algunos años más, pero el conjunto estuvo concluido hacia 1958. La Casa de Gobierno fue declarada Patrimonio Cultural de la Provincia en 1995, y en 2010 comenzaron las obras de restauración general del edificio

Conociendo Mendoza. El General José de San Martín explicándole las Máximas a su hija Mercedes Tomasa. En la Alameda (calles Corrientes y San Martín). Ciudad Capital de Mendoza.




Vídeo. Recordando al Ferrocarril Trasandino


Las mujeres en minifaldas en la década de 1960

Hace cincuenta años, la diseñadora británica Mary Quant introdujo la mini-falda y la mujer comenzó el senderismo por sus faldas. Y con faldas más cortas llegó pantimedias y medias estampadas, en sustitución de fajas y fajas. Fotos de mujeres en minifaldas del archivo Chicago Tribune tienen el título original publicada o información suministrada.

"Ocho pulgadas arriba de la rodilla? O, No, faldas podrían no ser tan corto ... o podrían hacerlo?" - Tribune foto de archivo, 18 de junio 1965

"Dos pájaros de Londres usan trajes a rayas de Christian Dior, cortas y estrechas, con énfasis en las caderas. Traje de la izquierda es azul marino y rayas del perno blanco, con blusa azul marino, culottes plisados, y corbata rayas horizontales. La versión cardigan está en rojo y blanco rayas con calcetines de color escarlata y blusa ". - UPI, 12 de mayo 1966

"Vestido de suéter de Tiffeau." En la pasarela de Nueva York. Reconocer Lauren Hutton? - Tribune foto de archivo, 07 de julio 1966

"Más audaz que nunca la concepción de un total look viene de Yves St. Laurent, miembro más joven de la alta costura de París. Está extendido el esquema cromático rojo, blanco y azul en este vestido de suéter con zigzags de los tres colores. Medias de lana Argyle combinan silenciado azul y rojo;. gorra de cuero blanco con redecilla adjunta de castor negro tiene hebilla de bronce, al igual que los de charol, zapatos de tacón grueso es el Modelo Carol Robins de Aquino Dominicana escuela secundaria ". - Tribune foto de archivo, 10 de septiembre 1966

Grandes bloques de color y reversible. La lavanda y el amarillo a juego con las botas de ante de lavanda. - Tribune foto de archivo, 14 de septiembre 1966

"SLEEK CHIC NUEVA YORK:. Chic es la palabra para este enérgico joven turno, modelada por la actriz Joey Heatherton El vestido corto con su oleada de rayas eléctricas y tapicería de cuero es una de las" Chicas de cuero ", diseñado por Don Simonelli para la colección de Mia caída . " - UPI, 19 de septiembre 1966

"Patas de gallo abstractas de nylon elástico se forman en las medias con parte superior túnica esgrimista adelantado plus tapa ($ 20) en Cheetah boutique." - Ron Bailey, Chicago Tribune, 10 de octubre 1966

"Encaje veneciano se utiliza para este par. Pam Kimmell, izquierda, de la escuela secundaria de Wheaton, lleva un vestido corto de color turquesa y el césped blanco ($ 35), adornado con un lazo gigante y los recortes en el dobladillo. Azul de Teri en blanco skimmer de algodón a cuadros ( $ 22.95) ofrece banda ancha de encaje y puntilla estrecha en el bajo ". - Earl Gustie, Chicago Tribune, 03 de noviembre 1966

"Vestido con el diseñador británico Paul Blanche de" Raingear, "una minifalda inconformista acampanada y chaqueta Ike, modelo Lorna McDonaugh ilumina la escena en la plaza en la 59 St. Tales equipos podrían hacer que los días de lluvia popular." - Teleobjetivo UPI, 09 de noviembre 1966

"Gayle Kirkpatrick de Atelier utiliza ternero tigre estarcido para un vestido discoteca sliplike asegurado con correas con piedras preciosas. Al caballo de una tienda de color diferente." - Tribune foto de archivo ,, 14 de noviembre 1966

"Mary Quant, la de piernas largas, atractivo diseñador de moda de Londres, era su propia mejor modelo para las minifaldas que vestían la década." Quant nombró a los mini-falda breve después de que su coche favorito, el Mini Cooper. - UPI, 21 de octubre 1967

"Madre eligió no para acentuar una cintura del imperio en su vestido N º 8383, en su lugar se utiliza un cinturón de cadena inteligente en la cintura normal. Vestido de la hija, de forma idéntica de estilo, se hace de patrón No. 8384." - Earl Gustie, Chicago Tribune, 17 de julio 1968

"Chic en un Mini, jovencita desenvuelve su almuerzo para deleite de los hombres." - Jack Mulcahy, Chicago Tribune, 30 de enero 2014

"Tablero de ajedrez Kicky de la tripulación de cuello jersey (alrededor de $ 16) bandas con rayas en dos tonos en las caderas, los puños y el cuello se hizo eco en los calcetines altos. Welt costura falda (alrededor de $ 11) es un fácil una línea." Y, por supuesto, blancos botas go-go, otra innovación Mary Quant. 1965 - folleto

"Un día azotada por el viento de lluvia caída en Chicago, pero la moda prevalece el viento o el agua alta vienen. Sólo el maxi-abrigo parece ofrecer protección contra los elementos, pero la atención de los observadores de la muchacha hace que el mini la elección de la mayoría de las mujeres jóvenes." - Jack Mulcahy, Chicago Tribune, 03 de noviembre 1969

Fuente: http://galleries.apps.chicagotribune.com/chi-140204-remembering-the-miniskirt-pictures/


Foto Antigua. LOS RAMONES. (1974) Que Seguro Que No Sabías Que Empezaron En Un Garaje

dailymail.co.uk
dailymail.co.uk

Cuando Los Ramones se formaron en 1974, dos de sus miembros ya habían tocado en otras bandas en garajes, así que ellos siguieron la tradición. Este grupo ha sido el principal promovedor del Punk Rock. 

Deportes en el Recuerdo. Formación del Equipo de Foot-Ball de Gimnasia y Esgrima de Mendoza, cuarta división A (año 1966)

Integrantes: H. Garay, E. Armando, J. Román. O. Cosseti, J. Sosa, S. Garberoglio, A. Sierra, J. Córdoba, V. Malagoli, O. Hassan, L. Frigerio.




jueves, 23 de octubre de 2014

Publicidad Gráfica. El Letrero Luminoso mas grande de Mendoza. Ubicado en calle José Vicente Zapata 127. (año 1966).

Mas de 11000 kilos de hierro en su estructura. Mas de 1 kilómetro y medio de tubos luminosos . Mas de 220 transformadores para sus 7 juegos luminosos. Mas de 5000 kilos de cemento en su estructura. Mas de 10 kilómetros de visibilidad en linea recta. Mas de 160 metros cuadrados de superficie iluminada





Coquetas, aburridas y Mendocinas

Los días festivos y los paseos en la antigua Mendoza eran "el entretenimiento de las intrigas amorosas, el consuelo de las viudas, el peregrinaje de las coquetas, el paraíso de las mujeres galantes, el purgatorio de los maridos celosos y el pasatiempo de los vagos”.

Ninguna mujer salía de su casa sin un abanico en la mano y sin cubrirse la cabeza. 


Durante al menos un siglo, después de días de encierro, bordados y alguna que otra visita social obligada, las mujeres mendocinas se lanzaban al paseo de los domingos como niñas. Antes se habían preguntado ¿qué me pongo?, alborotando arcones y cofres en busca de la prenda más adecuada para la ocasión.


El paseo dominical era el principal entretenimiento de la Mendoza colonial y siguió siéndolo hasta bien entrado el siglo XX. Esta salida estaba matizada por las festividades cívicas y religiosas, el carnaval, las temporadas de teatro, los esporádicos bailes y las tertulias.

Como algunas cosas nunca cambian, también entonces ese paseo era concebido como “el entretenimiento de las intrigas amorosas, el consuelo de las viudas, el peregrinaje de las coquetas, el paraíso de las mujeres galantes, el purgatorio de los maridos celosos y el pasatiempo de los vagos”, como señala una nota del diario El Constitucional de marzo de 1864. 

Ellas paseaban por la vieja Alameda, luego por las flamantes plazas creadas después del terremoto como la de Loreto (actual plaza Sarmiento), la Cobos (actual plaza San Martín y la plaza Independencia que se convertirá progresivamente en el símbolo social de la ciudad nueva. 

En esos espacios de recreo urbano, las mendocinas solteras además de pasear y comentar los chismes de la ciudad, tomaban helados, escuchaban a las bandas de música y coqueteaban en grupo, nunca solas, con hombres jóvenes que iban a la plaza a lo mismo que ellas: mostrarse, sonreír significativamente y conseguir una pareja. 

Y todos ellos, caballeros y doncellas, no perdían la oportunidad de hacer lo mismo durante las dos fiestas más cívicas más importantes. El 25 de Mayo y el 9 de Julio eran festejados con gran despliegue en Mendoza cuyos actos principales apenas tuvieron cambios a lo largo de los años. 

El 25 de Mayo comenzaba con un “saludo al Sol de Mayo” en las escuelas en las que los alumnos cantaban el Himno Nacional frente a los funcionarios de turno. Los actos continuaban con un desfile militar por las calles y un Te Deum, siempre “solemne”. 

El día de fiesta culminaba con un banquete y un baile de gala para la alta sociedad, en tanto que el resto de los mendocinos asistía a otra de teatro con tema patriótico, una feria de platos con rifa o una tertulia más o menos elegante. Tampoco faltaban las ramadas y bodegones improvisadas en las plazas con guitarreada y vino incluidos.

Y las mujeres debían vestir de acuerdo a la ocasión y cuando se trata del delicado equilibrio entre el ser y el parecer, en nuestra provincia ha pesado siempre más el parecer. 

De ahí que las manos femeninas fueran diestras en la confección de prendas. Las mujeres hilaban en los telares familiares paños con los que creaban desde, manteles a ropas para el culto, desde ponchos a vestidos según la moda española, primero, y la francesa después. 

Madres e hijas se ejercitaban en las labores de costura, cortando y cosiendo y las mujeres, incluso las de clase alta, tenían muy pocos vestidos que se pasaban en herencia a las mujeres de la familia. 

Estas prendas eran enriquecidas con accesorios como mantillas de encaje blancas y negras, peinetones, sólidos rodetes ajustados con peinetas y el infaltable abanico agitado con picardía o pacatería, según la dama. Ninguna mujer salía de su casa sin un abanico en la mano y sin cubrirse la cabeza y esta prenda era la que indicaba su condición social.

Las mujeres que no cosían su propia ropa podían comprarla, según su condición social, en las tiendas de ropa o en las pulperías, donde se vendían faldas de bayeta de fuertes colores, enaguas de lienzo blanco, jubones y pañuelos para el cuello.

Las mendocinas solían usar el traje español de faldas largas y anchas, que cubrían con enaguas confeccionadas en lienzo blanco y adornadas con puntillas. Sobre una camisa de lino con encajes, un corpiño o chaleco, se colocaba una chupa o jubón que, ajustado a la cintura, caía diez centímetros sobre las caderas y tenía mangas angostas y largas.

El único vestido de Remedios de Escalada de San Martín que no fue quemado debido a su enfermedad y que se conserva en el Museo Histórico de la Ciudad de Buenos Aires fue confeccionado bajo la influencia francesa. 

El vestido es de linón bordado en punto beauvais, con trabajo de pequeñas lentejuelas doradas recamando el bordado; el escote es redondo y las mangas cortas tienen forma de globo. De talle no demasiado alto parte  una falda que reúne los frunces en la delantera y se ven claramente en el ruedo los pesos que les colocaban para que no se levantaran al caminar. 

Se especula que el vestido fue confeccionado en una fecha cercana a su muerte (3 de agosto de 1823) ya que los talles altos fueron lentamente bajando y buscando su lugar natural hacia 1825.

Las jóvenes mendocinas que asistían a los bailes se esmeraban en lucir sus mejores galas y que sus atuendos eran comentados en detalle por las crónicas de los diarios del siglo XIX. Así, el diario El Constitucional da cuenta en una crónica de junio de 1877 que “la señorita MG vestía un elegante traje de seda color lila con encajes blancos  y en la cabeza flores naturales de color rosa”.

¿Cuántas veces se habrá preguntado el eterno `¿qué me pongo?´ la señorita MG antes de dar con su coqueto traje que mereció la atención del cronista? ¿Cuánto alboroto habrá hecho en su habitación, cuántas veces se habrá mirado al espejo antes de dar con la prenda adecuada para brillar en ese efímero baile? ¿Dónde estarán las flores que adornaron su cabeza?

Patricia Rodón


Fuente: http://www.mdzol.com/nota/297970

Foto Antigua.Microsoft (1975) Que Seguro Que No Sabías Que Empezaron En Un Garaje

raszl.com
raszl.com

En 1975, Bill Gates y Paul Allen fundaron lo que sería Microsoft en su garaje. Más tarde vendieron su primera licencía a IBM por 80.000$. Y actualmente Windows controla el mercado de sistemas operativos. - 

Copahues, Agua Mineral de Cacheuta (año 1899)

El Farmacéutico T. Belleli, famoso excursionista científico, recorría Los Andes Mendocinos y un buen día dio en la Estación Cacheuta con un manantial que resultó ser, luego de los análisis químicos del agua que lo forma realizados por los primeros químicos de Argentina (doctores, Arata, Quiroga, Ordoñez, Pando y Tagliabúe) resulto ser un verdadero tesoro del cual puede enorgullecerse Mendoza.



Vista General del Establecimiento en Cacheuta (año 1899)

El señor Bellili, que encontró en la boca del río Cacheuta un manantial de eximia agua de mesa que denominó Copahues, prosiguió sus estudios y no tardó en dar con otro en Puente del Inca, complemento del anterior formado con aguas laxantes superiores en calidad a las famosas de Austria y Hungría.


miércoles, 22 de octubre de 2014

Imágen del Cristo Redentor y Radio Panagra Frontera Argentina-Chile, (año 1940)

El Cristo Redentor a 4000 metros (13000 pies) sobre el nivel del mar, es una obra monumental costeada por los países de Argentina y Chile, como símbolo de paz eterna entre ambos países. El camino internacional que bordea dista a 212 km. de la provincia de Mendoza. 
En esta foto tomada mirando el lado Chileno, la estación meteorológica, Radio de la Panagra, y al pie de la estatua rodeada de nieve un automóvil Ford, a este vehículo se lo llamaba el Condor terrestre de Los Andes. El 80% de los vehículos que transitaban en esa década (1940), camiones,  autos particulares o de alquiler era, de marca Ford.



En 1933, la Pan American Grace Airways Corporate, emprendió un descabellado proyecto en procura de lograr un controlador aéreo eficaz, en uno de los pasos más altos de la cordillera.



El edificio sólo se unía al mundo civilizado por medio de la radio y del teléfono.

El antiguo refugio fue cuidadosamente ampliado y reformado, dándole mayores comodidades. Las instalaciones se componían de un techado especial con cielo raso aislante de los intensos fríos y pisos de madera. También, tres pequeñas habitaciones formaban el observatorio: la pieza en donde estaban instalados los aparatos de comunicación, el dormitorio y la cocina. En la habitación central existía una pequeña torre, en donde los dos esforzados moradores se hospedaban.

Fue por el mes de mayo de 1933 que dos hombres llamados Gregorio Neumosoff y Reynaldo Abelda se internaron voluntariamente en el lugar más alejado de toda la cordillera. Era la estación de control y meteorología de la empresa de aviación Panagra.

Gregorio Neumosoff y Reynaldo Abelda: perdidos en la cordillera
La estación del Cristo Redentor en los años ’70.

Dos tipos audaces



El reloj despertador sonó a las 4 de la madrugada, Gregorio Neumosoff se levantó y después de asearse y afeitarse, fue a la cocina a poner la tetera con agua para prepararse algunos matecitos. Luego, se sentó y encendió el radio. Eran las 6.40 horas de repente, desde la radio, se escuchó la voz del piloto del avión, anunciando su despegue del aeropuerto desde “Los Chorrillos” . “...vuelo 354 de Panagra, con dirección hacia Mendoza, estamos a una altura de 5.000 metros y a una velocidad de 135 millas por hora. Inmediatamente Gregorio contestó: “Aquí observatorio del Cristo; las condiciones del tiempo en este momento, son muy favorables para el vuelo, el viento sopla del sector Sudoeste a 30 kilómetros por hora y la visibilidad es de 5 millas. Cambio y fuera”.

Cada quince minutos el avión informaba sobre la posición. Los aviones tenían el huso horario de la ciudad de Nueva York. 

El joven Neumosoff transmitía el estado del tiempo tres veces al día a las dos aeroestaciones. También orientaba a los pilotos, en caso de mal tiempo, a tomar una ruta alternativa.

Luego de este intercambio con la civilización, todo volvía a la absoluta soledad. Soledad que se les hacía difícil a estos hombres, especialmente cuando los temporales duraban semanas enteras, en cuyas circunstancias la visibilidad no alcanzaba más allá de cuatro o cinco metros. 

En un invierno, aquellos estuvieron un mes y medio sin poder salir y casi sin provisiones. Nieve y más nieve era lo único que el viento arrastraba con violencia tal que algunas veces llegaba a lastimarles la cara al intentar salir al exterior.

Gregorio Neumosoff era el encargado y radiotelegrafista del observatorio, antes de tener este oficio fue empleado del ferrocarril Trasandino. El estaba habituado a la vida de montaña desde hacía muchos años. Su compañero, el mendocino Reynaldo E. Abelda, se encargaba de las tareas meteorológicas.

Ambos vivían en permanente desafío a las inclemencias de la naturaleza. Pasaron los largos días en que aparte de registrar sus observaciones tenían mucho tiempo libre. Tanto Gregorio como Reynaldo se entregaron a la lectura en la pequeña biblioteca improvisada en un rincón de una de las habitaciones. Los libros de Spencer, de José Ingenieros, eran devorados con la misma fricción de los libretos de los sainetes en boga.

Durante días y días no tenían más contacto con el mundo que el que les brindaba el telégrafo y el teléfono.

En el interior del refugio se hacía agradable por las estufas a querosén que estaban encendidas permanentemente, irradiaban calor y mantenían la temperatura a unos 18 grados, pero varias veces tuvieron inconvenientes con las mismas, y una vez casi murieron intoxicados. De todos modos era importante mantener el ambiente cálido para poder conservar las baterías que alimentaban la energía de los aparatos de medición. 

Estaban bien abastecidos de provisiones, al punto que la leña y carbón alcanzaban para ocho meses. 

El observatorio poseía un receptor de radiotelegrafía bastante adelantado para su época. Contaban también con un teléfono que comunicaba directamente a las oficinas de la Panagra, una en el campo aéreo de “Los Tamarindos” en Mendoza y la aeroestación de Santiago de Chile.

En el exterior de la construcción y como complemento de aquellos aparatos de comunicación, disponían de instrumental meteorológico: anemómetro para medir la velocidad de los vientos, barómetro, termómetros y una veleta.


El pasamanos salvador

A metros de la estación y con dirección al Norte, siguiendo un cordón de piedra, la compañía Panagra colocó un pasamanos de soga de 100 metros de largo para seguridad del observador que necesitaba cerciorarse del estado del tiempo. 

En esa parte de la cumbre el viento golpeaba furiosa y continuamente, pudiendo arrastrar a un hombre con facilidad al fondo de la quebrada. En una oportunidad a uno de los integrantes de esta estación, precisamente, el ayudante Abelda, fue sacudido por una ráfaga de viento y gracias a esa soga pudo salvarse de caer a un precipicio.

Estos dos héroes comprometidos con su trabajo, estuvieron soportando las inclemencias del tiempo y aislado de todo contacto con el hombre por meses con el objeto de informar las condiciones meteorológicas que existían en aquel punto. 

A ellos, como a otros que la historia ha ignorado, este merecido reconocimiento..

“Tenían serios inconvenientes con las estufas y una vez, casi mueren intoxicados”.


Foto Antigua. Moto Harley Davidson. Que Seguro Que No Sabías Que Empezaron En Un Garaje. (año 1901)

totalmotorcycle.com
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 En 1901, William S. Harley, planeó diseñar un motor para mover su bicicleta. Durante unos años Harley y su amigo Arthur Davidson estubieron planeando la primera bicicleta con motor, una motocicleta, creando la compañía Harley-Davidson en 1903.

La estrategia del escote: entre el deseo y la censura (año 1900)

Hacia 1900 las mujeres comenzaron a mostrar el cuerpo y fueron repudiadas por la Iglesia y de los hipócritamente escandalizados hombres. Pero a ellos le encantan las mujeres, todas, todas, las mujeres, que muestran su cuerpo en público. Siempre que no seás vos, claro.

La mujer que mostraba su cuerpo era mirada con desprecio. 

El espejo te devuelve una imagen que dice que esa ropa te queda muy bien, que estás preciosa, sexy, encantadora con ese escote de vértigo y esa faldita ajustada que destaca tus curvas. Pero cuando tu novio, tu marido o algún señor con aspiraciones de “dueño”, siempre justo antes de salir, te intercepta y de inmediato te pasa por el escaner, te evalúa, mide el efecto que podés provocar en un hombre, cualquier otro hombre, te censura y te grita: “¡Así no vas a ningún lado!”


Y si te toparas con un caballero de los andantes, Lancelot o Roland, digamos, te mandaría derecho a la hoguera o al convento sin dudarlo. Los señores que mataban dragones para demostrar su amor, se batían en duelo para defender tu honor o que escalaban murallas al estilo de Romeo sólo para entrever a su Julieta, tenían ideas muy estrictas respecto de cómo debía lucir y comportarse una doncella.

Las chicas del siglo XIII no sólo debían saber de memoria un completo código de sociabilidad que involucraba una extensa lista de normas sólo para mujeres, que iban desde las maneras apropiadas de moverse y caminar y la aplicación de los correctos modales de mesa a las buenas artes de lucir encantadora y diestra en juegos, canciones y bailes a la luz de las antorchas. Ese código también enseñaba cómo y cuándo mostrar los pies y cómo y cuándo usar el escote.

Exactamente igual que hoy, se aconsejaba el uso de algunos artificios, por ejemplo el de que “los bustos abundantes ganarán en interés con ropa ajustada”, mientras que “los vestidos amplios permitirán enmendar la delgadez”.

En su curioso libro, el “Escarmiento de damas”, Robert de Blois recomienda el cuidado de las manos y de la uñas, “que no han de sobresalir” y deja muy claro que “una dama adquiere mala reputación si no se muestra limpia; un aspecto cuidado y agradable vale más que una belleza descuidada”.

Al mismo tiempo, todas las convenciones desanimaban cualquier tipo de exhibicionismo pero animaban a cultivar cierto fetichismo y creaban todo tipo de fantasías eróticas al invitar a pensar que, efectivamente, lo que no se muestra del cuerpo es más hermoso que lo que se muestra.

“No es bueno para una dama desvelar su blanco cuerpo a otros que no sean sus íntimos. Una deja entrever su pecho a fin de que pueda advertirse qué blanco es su cuerpo. Otra deja voluntariamente que se muestre su costado. Una tercera descubre demasiado sus piernas. Un hombre sensato no ve bien esta forma de comportarse porque el deseo se apodera astutamente del corazón del prójimo cuando se enreda en ello la mirada”, se explaya el señor de Blois. Y agrega el viejo dicho: “¡Ojos que no ven, corazón que no siente!”

Estas palabras escritas hace tantos siglos fueron tan admonitorias y concordaban tan bien con la mezcla de creencias y temores de gentiles y cristianos que, desde entonces y hasta hace pocos años, “se comporta mal la mujer que ofrece su cuerpo a las miradas de los demás”.

Hacia 1900 las mujeres se atrevieron a desafiar los principios morales que las ataban y comenzaron a mostrar el cuerpo, y provocaron el consiguiente repudio por parte de la Iglesia y de los hipócritamente escandalizados hombres, siempre machistas, recibiendo una severa condena social.


Pero a muchas no les importó y los cuellos "hasta las orejas" dieron paso al escote en "V", cada vez más profundo, y las faldas se acortaron levemente, dejando al descubierto los tobillos, cosa que también causó estupor en la época porque durante siglos las piernas femeninas habían sido el símbolo erótico que "provocaba la lujuria en los hombres" razón por la cual debían ser escondidas. 


En los años ´30, la atención erótica cambió desde las piernas hasta el pecho y la espalda, la que era resaltada por prominentes escotes que provocaban el delirio masculino. Desde entonces, las mujeres ha hecho uso de los escotes y de las prendas ajustadas osciladondo entre la discreción más o menos sexy y la más explícita sensualidad perturbadora. 

A pesar de la masiva y creciente exposición de carne femenina que propalan la televisión, los medios e internet, mientras las mujeres siguen mostrando el cuerpo -algunas sólo por el placer de seducir a cualquiera que las mire y otras porque siguen asignándole a sus pechos y caderas un valor de mercancía-, el viejo prejuicio y temor masculino sigue vigente cuando la chica ligera de ropas es la mujer que consideran “propia”. 

Frente a esto, las mujeres tenemos al menos dos alternativas: guardar la mini, el escote, la lencería y toda la ropita sexy para la casa y encender de deseo del caballero puertas adentro; o ignorarlo, ponerse lo que tengamos ganas y convertirnos en un imán de miradas. 

Porque aunque tu chico no sea Lancelot y se parezca más a Super Mario Bros matando a mini dragones digitales, ponele la firma que le encantan las mujeres, todas, todas, las mujeres, que muestran su cuerpo en público. Siempre que no seás vos, claro.

Patricia Rodón


Fuente: http://www.mdzol.com/nota/296144
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