miércoles, 27 de julio de 2022

El 27 de Julio de 1929, en Suiza, se firmaba la tercera y mas importante de las cuatro convenciones de Ginebra.


En 1864 se firmó la primera de las convenciones donde preocupados por la suerte de los heridos en combate que quedaban en territorio enemigo, las naciones mas poderosas del siglo XIX decidieron la formación de las "Cruz Roja Internacional". En 1906 se realizó la segunda convención donde se agregaron procedimientos para el trato de prisioneros y náufragos. La primera guerra mundial desnudó lo endeble de estos tratados ya que las naciones firmantes cometieron aberrantes crímenes de guerra, esclavizaciones y ejecuciones masivas, pisoteando lo firmado. Con la clara necesidad de refundar los tratados comenzaron las negociaciones entre las nuevas potencias del siglo XX. El 27 de Julio de 1929 se firmó el mas ambicioso tratado humanístico internacional de la historia, la "Tercera Convención de Ginebra". En ella se determinaros los tratos que debían recibir los soldados hechos prisioneros, los civiles en territorios ocupados y los alcances de una rendición incondicional. Se determinó que la suerte corrida por las personas incluidas en los territorios ocupados no eran responsabilidad de las "personas" a cargo de la operación militar, sino del "estado" responsable de esos ejércitos, esto era para que no se juzgara a personas por crímenes de guerra sino a países. Se obligaba a los estados invasores a proveer de salud y alimento a los habitantes de los países invadidos y la imposibilidad de establecer trabajos forzados a la población civil. Lo firmado en esta convención entró en vigencia en Junio de 1931. Los horrores que se vieron en la segunda guerra mundial pisoteó lo firmado demostrando que sin la voluntad de cumplirlos, los tratados son solo papel pintado. En 1949 se convocó a una cuarta y definitiva convención, lo firmado en la tercera ya era lo suficientemente completa como para necesitar ampliarla, por ello solo se trató de una reafirmación de lo firmado en 1929.

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