Chicas en mini, ca. Década de 1960

La minifalda se convirtió en un ícono de la moda en la década de 1960, revolucionando la manera en que las mujeres se vestían y expresaban. Fue creada por la diseñadora británica Mary Quant en 1964, quien la introdujo en su tienda Bazaar en Londres. La prenda rápidamente ganó popularidad y se convirtió en un símbolo de la juventud, la libertad y la rebeldía de la época. La minifalda rompió con las normas tradicionales de la moda, que hasta entonces favorecían faldas más largas. Al permitir que las mujeres mostraran sus rodillas, la minifalda desató tanto admiración como controversia. Diseñadores como André Courrèges también contribuyeron a su popularización, incorporándola en sus colecciones y llevándola a las pasarelas internacionales. Además de ser una prenda de moda, la minifalda se convirtió en un símbolo cultural, reflejando los cambios sociales y la lucha por la igualdad de género. Fue adoptada por iconos de estilo como Twiggy y Jean Shrimpton, quienes ayudaron a consolidar su lugar en la historia de la moda