En 1889 con un estado Argentino aún en formación las elites oligárquicas ejercían el poder económico y por consiguiente, el político. Las consecuencias eran salarios estancados, abusos laborales y desocupación, que derivaron en huelgas y manifestaciones por toda Buenos Aires. Dentro de esa convulsionada situación, Francisco Barroetaveña publica una nota en el diario La Nación titulada "¡Tu quoque juventud! En tropel al éxito", no fue una nota mas, la juventud se despertó para tomar las riendas de su futuro, se hicieron llamar “Cívicos” y se reunieron para constituir la “Unión Cívica de la Juventud”. Para presidir al grupo convocaron al hombre que despertó sus espíritus, Barroetaveña. Dentro de este grupo se aglutinaron los dirigentes de la dispersa oposición a Juárez Celman, consensuaron un programa y se renombraron como “Unión Cívica”. Su nuevo líder, Leandro Nicéforo Alem encabezó la “Revolución del Parque”, que acabó con el unicato de Celman, el poder recayó en su vice, Carlos Pellegrini, para las siguientes elecciones la Unión Cívica eligió como candidatos a “Bartolomé Mitre y Bernardo de Yrigoyen”. El candidato oficialista, Julio Argentino Roca, convenció a Mitre de generar una lista de unidad, y este aceptó, Alem enfurecido se opuso al acuerdo y decidió romper con los nuevos dirigentes. El 26 de Junio de 1891, Leandro Alem fundaba la “Unión Cívica Antiacuerdista”, pocos días después cambiaría su nombre a “Unión Cívica Radical”. Los cuatro preceptos de Alem eran libertad política, honradez administrativa, impersonalidad de la coalición y sentimiento nacional, también se pronunciaría por un estado laico, federal e igualitario. Diversas diferencias surgidas desde su origen provocaron divisiones, rencores y reunificaciones, pero siempre se mantuvo como una opción política y popular que llegó a la presidencia en varias oportunidades y regó la historia Argentina de grandes dirigentes. En la foto de la nota se ve a Leandro Nicéforo Alem, Marcelo Torcuato de Alvear, Hipólito Yrigoyen, Roberto Marcelino Ortiz, Arturo Frondizi, Arturo Humberto Illia, Ricardo Balbín y Raúl Alfonsín.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario