El 22 de Diciembre de 1936, comenzaba formalmente la cooperación de Mussolini con el bando militar español sublevado al mando de Francisco Franco, en una clara y bochornosa injerencia internacional en un golpe de estado y en una guerra civil, ese día llegaban a Cádiz el primer contingente del Corpo Truppe Volontarie, mas conocidos como los Camisas Negras.

El fracaso del golpe de estado en Julio de 1936 dio inicio a una ola de enfrentamientos entre el bando republicano del presidente constitucional Manuel Azañay los militares sublevados al mando de Francisco Franco. No fue Franco quien pide la ayuda de Mussolini, este último simpatizante de los ideales fascistas del español y con un odio manifiesto ante cualquier gobierno socialista o comunista le comunica su intención de colaborar. Informalmente llegaron algunos milicianos voluntarios a principios de Octubre e intervinieron en el combate de Mallorca, pero para Diciembre, Mussolini decidió enviar los primeros 3 mil Camicie Nere y material bélico como carros de asalto y blindados. El Corpo Truppe Volontarie fue comandado por Mario Roatta, Annibale Bergonzoli, Ettore Bastico, Mario Berti y Gastone Gambara, si bien estaban bajo las órdenes directas de Franco, tomaban decisiones propias y muchas veces comprometieron las misiones del bando sublevado. Técnicamente mejor equipados pero no tan comprometidos como los propios españoles, pese a que hacia 1937 ya había mas de 50 mil Camicie Nere en España poco colaboraron y fueron mas partícipes de derrotas que victorias, su peor fracaso fue la Batalla de Guadalajara donde no pudieron ingresar a Madrid por el norte. Franco íntimamente los consideraba cobardes y opinaba públicamente que solo servían para marchar ordenados, pero como venían acompañados de excelente material bélico decidió soportarlos. Las fuerzas franquistas apoyados por los Camicie Nere y la Luftwafe alemana fueron responsables de innumerables crímenes de guerra jamás juzgados. En Abril de 1939, con la victoria de Franco y el fin de la Guerra Civil Española, todos los efectivos fueron embarcados rumbo a Roma.