Nacido con el nombre de Mao Rùnzhī Tse-Tung, fue líder e ideólogo de la República Popular China, referente de la revolución, máximo jefe del Partido Comunista. Ser propulsor de magníficos cambios sociales no lo exculpa de sus persecuciones y genocidios. Creció en el seno de una próspera familia de campesinos que le permitió acceder al máximo nivel de educación. Tras graduarse en la Primera Universidad Normal de Hunan, viajó a Pekín donde obtuvo un trabajo como asistente en la biblioteca de la 'universidad nacional de Pekín' que le permitió leer sin límites y asistir a charlas de pensadores locales. En 1920 realizó un extenso viaje por el interior de China donde conoció las necesidades y las injusticias que sufrían sus compatriotas, esto moldeó su pensamiento, al regresar a Hunan se unió al Partido Comunista y en 1923 fue elegido miembro permanente del comité central. Durante mas de 20 años Mao participó en movimientos revolucionarios que intentaron infructuosamente llegar al poder, hasta que en 1946 como presidente del partido comunista Chino reagrupó el Ejército Popular de Liberación con el que llegó al poder en 1949. Desde ese momento tomo las riendas del destino de la nueva "República Popular China", se diferenció del comunismo industrial Ruso y adoptó una revolución campesina, redistribuyendo las tierras de manera equitativa. Logró reponer a China de un atraso de décadas, la esperanza de vida pasó de 32 a 65 años, la alfabetización pasó de 15% a 85% y la mortalidad infantil bajó a índices Europeos, avances impensados para la época. Su liderazgo personalista, la intolerancia y el terrorismo de estado mancharon su obra. Tuvo manchas insalvables como la convocatoria "Movimiento de las Cien Flores" utilizada para identificar opositores y encerrarlos. La política del "Salto hacia adelante" hizo fracasar la industrialización, provocando hambruna que costó la vida de 50 millones de personas. Para cambiar la imagen de su régimen totalitario instauró la revolución cultural y volvió al comunismo puro, pero ya era tarde. En 1959 abandonó el gobierno dejándolo en manos de Liu Shaoqi, aunque al seguir en su cargo de presidente del partido, nunca abandonó el poder. Por complicaciones por el tabaco y un naciente mal de Parkinson, Mao falleció en Pekín el 9 de septiembre de 1976. Un detractor y enemigo de Mao llamado Deng Xiaoping dijo: "-Mao estaba las tres cuartas partes en lo correcto y una cuarta parte errado, su contribución fue primordial y sus errores secundarios, aunque yo estuviera en ese último cuarto".
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