El 5 de Agosto de 2014, el "Banco nacional de Datos genéticos" le confirmaba al Juzgado Federal N° 1 de la Capital Federal, la identificación del nieto apropiado N°114, no era uno mas, se trataba de Guido, el nieto de Estela de Carlotto. (EH)

Con el nombre de Ignacio Hurban vivió en Olavarría creyendo que había nacido el 2 de Junio de 1978 y que sus padres eran Juana Rodríguez y Clemente Hurban. Desde los 12 años inició una creciente carrera musical especializándose en piano y composición, grabó discos de tango y formó un cuarteto de Jazz, el "Ignacio Hurban Group". En Mayo de 2014, sin saber su pasado ni su futuro compuso el tema "Para la memoria" sobre los oscuros días de la dictadura, en Junio un amigo de la familia le da la noticia de su adopción en dudosas circunstancias. Ignacio decide presentarse en "Abuelas de Plaza de Mayo" y en la "Comisión Nacional por el Derecho a la Identidad", que tomaron muestras de sangre para el "BNDG". La jueza María Romilda Servini de Cubría, titular del Juzgado Federal N° 1 de la Capital Federal, recibió los resultados que confirmaban la filiación de Ignacio y remitió los resultados a la "CONADI" para que se lo comunicara a los interesados. El destino quiso que la encargada de comunicarle a Ignacio y a Estela las noticias, fuera la titular de "Abuelas", Claudia Carlotto, la verdadera tía de Ignacio. Los resultados del examen de ADN ayudaron a reconstruir la verdadera historia de Ignacio, era hijo de Walmir Oscar Montoya, oriundo de Comodoro Rivadavia y Laura Estela Carlotto, secuestrados en Noviembre de 1977. Estando en el centro clandestino de detención "La chacha", Walmir fue torturado y asesinado frente a Laura embarazada de Ignacio, su cuerpo fue enterrado como NN en el cementerio de Berazategui y recuperado en 2009. El 26 de junio de 1978, Laura, estando esposada, dio a luz a "Guido" como ella lo llamó, unas horas después le sacaron a su hijo, dos meses mas tarde fue acribillada en la cabeza y por la espalda con una Itaka. Estela logró reunirse con el general Reynaldo Bignone, quien le dijo que su hija ya no estaba con vida, en agosto de 1978 fue convocada por los militares y le fue entregado el cadáver de su hija, a partir de allí se unió a la Asociación Abuelas de Plaza de Mayo, sumando su búsqueda de Guido a la de otras mas de 400 familias. Su lucha pacífica basada en el pedido de justicia, carente de todo signo de revancha o venganza rindió sus frutos. Dos días después de la identificación se produjo un mágico encuentro entre Guido, Estela y los padres de Walmir que hasta ese momento ignoraban la existencia de su nieto, este rebautizó a su grupo musical como "Ignacio Guido Montoya Carlotto Group".