Godoy Cruz, entre motores y memoria: cortejo histórico sobre ruedas (ca.1960) Mendoza

Hace décadas, en las calles de Godoy Cruz, Mendoza, se vivió una escena solemne y mecánicamente inolvidable: un Kaiser Carabela fúnebre, símbolo de elegancia nacional, encabezaba un cortejo precedido por un Dodge Victory Sedan 1929, ícono de la era dorada del automóvil estadounidense. El Kaiser Carabela, producido en Argentina por Industrias Kaiser Argentina (IKA) entre 1958 y 1962, fue uno de los primeros autos de lujo fabricados localmente, con motor Continental y diseño robusto. Por su porte y comodidad, fue elegido en numerosas ocasiones como vehículo fúnebre. El Dodge Victory 1929, con su carrocería de cuatro puertas y líneas clásicas, representaba el esplendor de la industria automotriz norteamericana de entreguerras. Su presencia en el cortejo no solo aportaba distinción, sino también un guiño a la historia del transporte urbano mendocino. La fotografía muestra ambos vehículos estacionados frente a un edificio con campanario y techo curvo, posiblemente una iglesia o casa funeraria. El Kaiser Carabela está adornado con coronas florales, mientras el Dodge Victory luce su silueta clásica. Personas abrigadas observan en silencio, en un entorno de árboles sin hojas que sugiere invierno y recogimiento. El Kaiser Carabela fue el primer sedán argentino con caja automática opcional. El Dodge Victory 1929 tenía motor de seis cilindros y fue popular entre familias y servicios públicos. Ambos modelos son hoy piezas de colección y patrimonio rodante. #GodoyCruzHistórico #KaiserCarabela #DodgeVictory1929 #CortejoSobreRuedas #MemoriaMecánica #AutosConHistoria #13Diciembre #MendozaVintage #PatrimonioRodante #mendozantigua 

La fotografía captó la Avenida Las Heras de la Ciudad de Mendoza en 1969, reflejando el pulso urbano de una ciudad en expansión, con tránsito intenso, arquitectura tradicional y señales del comercio local en plena modernización.

En 1969, la Avenida Las Heras se consolidaba como uno de los ejes comerciales y de tránsito más activos de la Ciudad de Mendoza. La imagen muestra una escena típica de la época Se observa una alta densidad vehicular, propia de una ciudad que ya enfrentaba desafíos de movilidad urbana.  En ese período, Mendoza atravesaba un proceso de modernización vial, con la pavimentación de avenidas clave, el crecimiento del parque automotor y la consolidación de zonas comerciales como Las Heras, San Martín y Godoy Cruz. La Avenida Las Heras fue parte del antiguo Camino Real al Alto Perú, y su trazado se mantuvo como eje estructural desde la colonia. En los años 60, Mendoza vivió un auge de urbanización, con la expansión de barrios periféricos y la consolidación del microcentro como núcleo comercial. El transporte público incluía colectivos de línea y trolebuses, que funcionaban desde 1958. #LasHeras1969 #MendozaRetro #CiudadEnMovimiento #MemoriaUrbana #TránsitoYTradición #AvenidaConHistoria #PaisajeMendocino #mendozantigua 

🧵 1960: La Liquidadora abrió sus puertas en La Consulta. San Carlos. Provincia de Mendoza

En el año 1960, se llevó a cabo la inauguración de la tienda La Liquidadora, ubicada en calle San Martín 334, en el distrito de La Consulta, departamento de San Carlos, Mendoza. Este comercio se sumó al auge de la actividad textil y comercial que caracterizó a la región durante las décadas de posguerra, cuando los pequeños negocios familiares comenzaron a consolidarse como pilares de la economía local. La apertura contó con la participación de sus primeras vendedoras, quienes marcaron el inicio de una atención personalizada y cercana: Doris Puchol, Mabel Prieto, Ilda Vigolin y Marta Magre. Vestidas con elegancia y profesionalismo, representaron el espíritu emprendedor de las mujeres mendocinas en el comercio minorista.  La Consulta vivió en esos años una expansión comercial vinculada al crecimiento agrícola y al desarrollo de rutas provinciales, lo que facilitó el abastecimiento y la circulación de bienes. Tiendas como La Liquidadora ofrecían ropa, telas y accesorios, convirtiéndose en puntos de encuentro social y referentes de estilo en la comunidad. La fotografía de aquel momento captura no solo una inauguración, sino también un gesto de modernidad y pertenencia, en una época donde el comercio barrial comenzaba a definir la identidad urbana de los pueblos mendocinos. #LaLiquidadora1960 #LaConsulta #SanCarlosMza #ComercioLocal #MemoriaBarrial #TiendasHistóricas #MujeresEnElComercio #ArchivoMendoza #ModaYTradición #HistoriaMendocina #mendozantigua 

El 26 de septiembre de 1960, la IV Brigada Aérea de Mendoza, ubicada en El Plumerillo, recibió los primeros cazas F-86F Sabre, marcando un hito en la historia de la Fuerza Aérea Argentina.

Estas aeronaves, adquiridas a los Estados Unidos, llegaron desde la Base Aérea Williams (Arizona) y fueron incorporadas al Grupo 1 de Caza Bombardeo, transformando radicalmente las capacidades operativas de la institución. El F-86 Sabre, desarrollado por North American Aviation, fue uno de los cazas más emblemáticos de la Guerra Fría, utilizado por más de 30 países. Su llegada a Mendoza significó un salto tecnológico: por primera vez, se operaron jets supersónicos con capacidad de combate aéreo, bombardeo táctico y entrenamiento avanzado. El diseño del emblema del grupo, creado en 1961, reflejó esta nueva era: incluía símbolos de velocidad, precisión, sabiduría y combate, acompañado por el lema “Ad Maiora”. Durante más de dos décadas, los Sabre participaron en ejercicios, demostraciones y misiones de patrullaje, siendo parte de la Escuadrilla Cruz del Sur, unidad acrobática que representó al país en eventos internacionales. A pesar de su robustez, varios aviones fueron retirados tras accidentes, como el C-101, destruido en 1968 sobre San Carlos, y el C-102, que cayó en 1983 en Fray Luis Beltrán. La incorporación de los Sabre consolidó a Mendoza como un centro estratégico de defensa aérea y formación militar. Hoy, su legado es recordado como el inicio de la era del jet en Argentina, y su silueta permanece en la memoria de quienes vivieron aquella transformación. #Sabre1960 #IVBrigadaAérea #FuerzaAéreaArgentina #JetsEnMendoza #Grupo1DeCaza #CruzDelSur #HistoriaMilitar #F86Sabre #ElPlumerillo #ArchivoAeronáutico #mendozantigua 

The Sportsman 1969: elegancia y consumo en la Mendoza del ayer

Fotografía que muestra una sección del salón comercial de The Sportsman, en pleno centro de la Ciudad de Mendoza, durante el año 1969. El espacio, moderno para su época, ofrecía una experiencia de compra refinada, con mostradores organizados y productos cuidadosamente exhibidos, reflejando el pulso urbano y el estilo de consumo mendocino de fines de los años sesenta. #Mendoza1969 #TheSportsman #ConsumoRetro #EstiloYMemoria #SalónDeÉpoca #ComercioConHistoria #ModaYCiudad #ArchivoMendocino #EleganciaLocal #VitrinasDelPasado #mendozantigua 

En 1969, el gasómetro de la planta de Gas del Estado en Godoy Cruz era símbolo de infraestructura energética y modernización urbana, parte de una red que abastecía a miles de hogares mendocinos en plena expansión demográfica.

La imagen de 1969 muestra el imponente gasómetro de la planta de Gas del Estado ubicada en Godoy Cruz, Mendoza. Estas estructuras esféricas, diseñadas para almacenar gas natural a baja presión, fueron esenciales en el desarrollo energético argentino durante el siglo XX. Su forma permitía una distribución uniforme de la presión interna, optimizando el almacenamiento y la seguridad. La planta mendocina formaba parte de la red nacional de Gas del Estado, empresa estatal creada en 1946 que impulsó la expansión del servicio domiciliario en todo el país. En Mendoza, el gasómetro de Godoy Cruz abastecía a miles de hogares, industrias y comercios, consolidando el crecimiento urbano del Gran Mendoza. Este tipo de instalaciones eran comunes en ciudades como Buenos Aires, Rosario, Córdoba y Bahía Blanca, y representaban el avance tecnológico de la época. El gasómetro de Godoy Cruz se convirtió en un ícono local, visible desde distintos puntos del departamento, hasta su desmantelamiento en décadas posteriores. En 1977, la planta fue escenario de una explosión trágica que dejó al menos tres obreros fallecidos y generó temor en la comunidad de Villa Hipódromo. El siniestro nunca fue completamente esclarecido, pero marcó el inicio del declive de estas estructuras, reemplazadas por sistemas más modernos y seguros. Hoy, el recuerdo del gasómetro permanece como parte de la memoria industrial de Godoy Cruz, testimonio de una época en que el acero, el gas y la ingeniería sostenían el pulso de la ciudad. #Gasómetro1969 #GodoyCruzIndustrial #GasDelEstado #MemoriaEnergética #InfraestructuraHistórica #MendozaDeÉpoca #VillaHipódromo #PatrimonioTecnológico #GiganteDeAcero #EnergíaYCiudad #mendozantigua 

🚖 1968: El Caburé, el taxi argentino con mirada de ave — diseño industrial, identidad popular y legado mecánico

El Rastrojero T-63 “Caburé” marcó un giro audaz en la historia del automóvil argentino, combinando ingeniería nacional, estética europea y funcionalidad urbana. Fabricado por la Dirección Nacional de Fabricaciones e Investigaciones Aeronáuticas (DINFIA), este modelo fue pensado para flotas de trabajo, especialmente taxis, y se convirtió en un ícono de la movilidad popular en los años 70. En 1968, los Rastrojeros abandonaron el diseño “Carucita” para adoptar el nuevo estilo “Caburé”, apodo inspirado en sus faros triangulares, que recordaban la mirada penetrante del caburé, un pequeño búho del Cono Sur. El rediseño fue obra de ingenieros italianos contratados por IME, y se inspiró en modelos como el Fiat 1800 y 2100, con líneas más modernas y aerodinámicas. El Rastrojero Conosur fue una adaptación del clásico Rastrojero Diesel, transformado en un sedán de cuatro puertas para uso intensivo en servicios públicos y transporte urbano. La parte delantera conservaba el diseño de la camioneta original, pero desde el parabrisas hacia atrás se trataba de una carrocería completamente nueva. Las tapas de baúl provenían de los Torinos modificados por Lutteral, empresa que fabricaba versiones como el Torino Comahue, lo que demuestra la reutilización creativa de componentes industriales. Motor: Indenor XD 4.88, ciclo Diesel, válvulas a la cabeza, árbol de levas lateral. Cilindrada: 1946 cm³. Potencia: 60 HP (DIN). Consumo: 1 litro de gasoil cada 10 km Producción: 1974–1979, año en que se cerró la línea Rastrojero y toda la producción de IME. El Caburé fue más que un taxi: fue símbolo de trabajo, resistencia y diseño nacional, y circuló por calles de todo el país durante más de una década. Hoy es objeto de culto entre coleccionistas y restauradores, y forma parte del patrimonio industrial argentino. #Scroll1968, #CaburéTaxi, #RastrojeroConosur, #DiseñoPopular, #MemoriaMecánica. #mendozantigua. El Rastrojero T-63 “Caburé” no tenía un color único: se fabricó en varios tonos, aunque los más comunes fueron el gris claro, verde oliva, amarillo pálido y rojo oscuro, todos con acabado mate o satinado. Estos colores respondían a criterios funcionales más que estéticos, ya que el Caburé estaba destinado principalmente a flotas de trabajo y taxis, donde la visibilidad, durabilidad y facilidad de mantenimiento eran clave. A diferencia de los autos de lujo de la época, no se ofrecía una paleta amplia ni opciones personalizadas, y los colores eran definidos por la IME (Industrias Mecánicas del Estado) según disponibilidad de pintura industrial y uso previsto.

🔧 IADE, 1963: Donde la técnica era futuro — Radios, válvulas y saberes que conectaban generaciones. Buenos Aires

En 1963, la Escuela Técnica IADE (Instituto Argentino de Enseñanza) en Buenos Aires se destacaba como uno de los centros formativos más activos en el campo de la electrónica aplicada. En sus aulas, jóvenes aprendían a armar, reparar y comprender el funcionamiento de radios, televisores y receptores de válvulas, en una época donde la tecnología comenzaba a transformar la vida cotidiana. IADE fue parte del auge de la educación técnico-profesional argentina, impulsada por el Estado y por instituciones privadas que buscaban capacitar mano de obra especializada para una industria en crecimiento. En sus talleres se enseñaban principios de radiofrecuencia, circuitos superheterodinos, válvulas termoiónicas y electrónica básica, con un enfoque práctico y riguroso. El modelo educativo combinaba teoría científica con trabajo manual, siguiendo la tradición de escuelas técnicas como la Otto Krause y el INET, que desde principios del siglo XX formaban técnicos para sectores clave. La imagen de estudiantes trabajando sobre receptores de cinco válvulas tipo americana, guiados por un docente, refleja el espíritu de la época: aprender haciendo, con herramientas, soldadores y esquemas eléctricos como lenguaje común. Esta formación no solo preparaba para el empleo, sino que cultivaba curiosidad científica, fomentando vocaciones en ingeniería, telecomunicaciones y diseño industrial. IADE formó parte de una red de instituciones que anticiparon el impacto de la electrónica en la vida moderna, desde la radio familiar hasta los primeros televisores nacionales. Hoy, estas experiencias son reconocidas como patrimonio educativo, y su legado se conserva en archivos, testimonios y publicaciones como el dossier de Historia de la Educación Técnica en Argentina. #Scroll1963, #IADEElectrónica, #RadiosYVálvulas, #TécnicaQueForma, #BuenosAiresEnCircuito, #AprenderHaciendo #mendozantigua 

🏞️ Tupungato, 1969: corazón del Valle de Uco, entre historia, paisaje y comunidad

La imagen de la ciudad capital de Tupungato en 1969 nos transporta a una época de transformación silenciosa en el Valle de Uco, una región que comenzaba a consolidarse como polo agrícola, cultural y turístico en la provincia de Mendoza. Fundada oficialmente como villa en 1858, Tupungato es cabecera del departamento homónimo y se ubica a más de 1.000 metros sobre el nivel del mar, rodeada por viñedos, frutales y la imponente presencia del volcán Tupungato, que da nombre a la ciudad y al valle. Durante la década del 60, Tupungato vivía una etapa de crecimiento urbano y consolidación institucional. Según registros históricos, ya contaba con registro civil, juzgado de paz, comisaría y servicios básicos, y comenzaba a perfilarse como centro de referencia en la región. En paralelo, se desarrollaban obras de infraestructura, caminos rurales y mejoras en la conectividad con Mendoza capital, a través de rutas provinciales como la RP 86, RP 88 y RP 89, que la enlazan con la RN 40. La ciudad, con una superficie de 7,1 km² y una altitud media de 1.072 m, se caracteriza por su trazado ordenado, su plaza central y su arquitectura de época, que combina casas bajas, galerías y edificios públicos. En 1969, Tupungato era aún un pueblo de ritmo pausado, pero con una identidad fuerte, marcada por la tradición agrícola, la religiosidad popular y el sentido comunitario. Hoy, Tupungato es uno de los destinos más valorados del Valle de Uco, con más de 17.000 habitantes y una creciente actividad vitivinícola, gastronómica y turística. Su historia, sin embargo, se sigue escribiendo desde esa imagen de 1969: un pueblo enraizado en el valle, con mirada al futuro y memoria viva. #Scroll1969 #TupungatoVivo #ValleYMemoria #RaízAndina #HistoriaEntreViñas #mendozantigua 

🏛️ 3 de noviembre de 1969: Mendoza inaugura su nueva Facultad de Ciencias Médicas — arquitectura, ciencia y futuro en el corazón universitario

Ese lunes 3 de noviembre de 1969, la ciudad de Mendoza fue testigo de un hito académico y arquitectónico: la inauguración oficial del edificio de la Facultad de Ciencias Médicas en el flamante Centro Universitario de la Universidad Nacional de Cuyo. El acto solemne, previsto para las 11 de la mañana, marcó la consolidación de una obra moderna que venía gestándose desde mediados de los años 60, como parte del proyecto de expansión de la Ciudad Universitaria. La Facultad de Ciencias Médicas había sido creada por decreto el 26 de diciembre de 1950, y comenzó a dictar clases en 1951, pero no fue hasta 1965 que se trasladó a su sede definitiva en el predio de Parque General San Martín, según detalla su reseña institucional oficial. El edificio inaugurado en 1969 representaba una apuesta por la infraestructura científica de vanguardia, con laboratorios, aulas amplias y espacios diseñados para la formación médica integral. La ceremonia de apertura se inscribía en un contexto de fuerte inversión estatal en educación superior, impulsado por la Universidad Nacional de Cuyo, fundada en 1939. La creación del Centro Universitario buscaba reunir en un mismo espacio físico las distintas facultades, promoviendo la interdisciplinariedad, el acceso equitativo y el desarrollo regional. Desde entonces, la Facultad de Ciencias Médicas se ha convertido en una referencia nacional en formación sanitaria, investigación biomédica y extensión comunitaria. En 2021, celebró 70 años de su primera clase oficial, reafirmando su compromiso con la salud pública y la excelencia académica. #Scroll1969 #MendozaUniversitaria #CienciasMédicasUNCuyo #ArquitecturaYConocimiento #InauguraciónHistórica #mendozantigua 

🌙 Mendoza, 1969: noches de humo, ritmo y deseo en la ciudad que nunca dormía

En el verano de 1969, la vida nocturna mendocina alcanzaba su punto más alto: una mezcla de música, humo, brebajes sofisticados y escenarios teatrales convertía a la ciudad en un territorio vibrante y despreocupado, donde cada rincón ofrecía una experiencia distinta. Desde los boliches más estridentes hasta los refugios gastronómicos de madrugada, la fiesta era un ritual colectivo que marcaba el pulso cultural de la época. Los locales más emblemáticos —como Al Diablo, Stereo, Los Pájaros, Kangaroo, La Cueva, El Grille, Guido’s Club y Happening— ofrecían ambientes que iban desde lo psicodélico hasta lo sofisticado. En Al Diablo, el bullicio reemplazaba la intimidad: allí se buscaba aturdirse en compañía, entre happenings y decorados delirantes. En Stereo, la atmósfera era más serena, ideal para quienes preferían la introspección musical. Los Pájaros, con su estética teatral y murales de yeso, era punto de encuentro obligado. Allí, entre cócteles alambicados y cervezas al maraschino con queso fundido, se deslizaban noches enteras de humo, música y minifaldas. En Kangaroo, el baile se desplegaba sobre un estaño poblado, en un entorno que recordaba a los filmes de Antonioni. La ruta nocturna continuaba por Tobago y desembocaba en La Cueva, abierta los 365 días del año, sin importar el clima. Para los que salían hambrientos de la pista, La Güeya ofrecía desde chorizos criollos hasta sándwiches exóticos, acompañados por consomé caliente. Y en la calle Tiburcio Benegas al 700, los carritos de Don Claudio esperaban con paciencia a los últimos trasnochados, ofreciendo una surtida gama de alimentos para cerrar la noche con sabor. #Scroll1969 #MendozaDeNoche #BolicheYMemoria #FiestaRetro #RitmoYQueso #mendozantigua 

⚡ Septiembre de 1969: El Nihuil II entra en escena y potencia el futuro energético de Mendoza. Parte del tubo de descarga está por ser colocado en obra.

En septiembre de 1969, la provincia de Mendoza vivía un momento clave en su historia energética: la central hidroeléctrica El Nihuil II, ubicada sobre la presa Aisol en la cuenca del río Atuel, se encontraba en plena etapa de montaje. Uno de los hitos más esperados era la colocación del tubo de descarga, pieza fundamental para canalizar el caudal hacia las turbinas. La maniobra, compleja y de alto riesgo técnico, fue completada con éxito, marcando el inicio de una nueva etapa de generación eléctrica en la región. Gracias a esta obra, Mendoza incorporó 87.000 kW adicionales a su matriz energética, fortaleciendo su capacidad de abastecimiento para industrias, hogares y proyectos de desarrollo. La central, operada por Agua y Energía Eléctrica S.E., cuenta con 6 turbinas Francis y una potencia instalada total de 131,2 MW, con una generación media anual de 380 GWh, según datos oficiales del Aquabook del Ministerio de Obras Públicas. El Nihuil II forma parte del Sistema Hidroeléctrico Los Nihuiles, un conjunto de presas en cascada que aprovecha el desnivel natural del río Atuel. Este sistema incluye también las centrales Nihuil I y Nihuil III, y ha sido clave en el desarrollo energético y agrícola de la región sur mendocina. La construcción de El Nihuil II comenzó en 1967 y finalizó en 1969, aunque la central entró en servicio en 1968, adelantándose a los plazos previstos. Su impacto no fue solo técnico: también generó empleo, movilizó recursos locales y consolidó a Mendoza como referente en infraestructura hidroeléctrica. #Scroll1969 #NihuilPotencia #EnergíaAndina #RíoAtuelVivo #MendozaElectrica #mendozantigua 

84 Paginas Impresas, 3 Secciones🗞️ Lunes El 17 de octubre de 1960, la portada de Diario Clarín reflejaba un país en tensión pero con promesas de estabilidad: declaraciones del equipo económico, movimientos militares y ecos del conflicto internacional. Una postal de época que aún resuena.

“Argentina 1960: crisis, confianza y titulares que marcaron época”

La tapa del diario Clarín del lunes 17 de octubre de 1960 ofrece una radiografía política y social de la Argentina de entonces. Bajo el título principal “Declaración del Equipo Económico”, el gobierno de Arturo Frondizi intentaba transmitir calma tras una grave crisis financiera, con el mensaje: “El pueblo debe tener confianza”. El ministro Álvaro Alsogaray, figura clave del liberalismo económico, había mantenido una reunión con el presidente para delinear medidas de estabilización. 🪖 En paralelo, la tapa destaca una “Reunión de Mandos”, con imágenes de altos jefes militares, en un contexto donde las tensiones entre el poder civil y las Fuerzas Armadas eran constantes. La nota sobre Cuba —“Ejecutan a ciudadanos de EE.UU.”— refleja el clima internacional convulsionado, con la Revolución Cubana en plena radicalización y el mundo en plena Guerra Fría. 🏇 En la sección deportiva, se celebra el triunfo de Troubadour en el “Nacional”, una carrera hípica de gran prestigio, con una secuencia fotográfica que captura el momento exacto del cruce de meta. 📚 Según el archivo digital de Tapas Clarín, esta edición forma parte de una colección que permite explorar más de 70 años de historia argentina a través de sus portadas. La tapa de ese día es un testimonio visual de un país que buscaba equilibrio entre modernización económica, presión militar y contexto internacional explosivo.

📺 “Geloso: el sonido y la imagen que marcaron los ´60” — Tecnología italiana, teclas de colores y rock argentino en cinta

En los años 60, la marca italiana Geloso desembarcó en Argentina con una propuesta que combinaba calidad, diseño y tecnología de vanguardia. Fundada en Milán en 1931 por Giovanni Geloso, la empresa se había ganado prestigio en Europa por sus televisores, radios y grabadores de cinta, conocidos por su construcción robusta y estética moderna. En Argentina, Geloso se instaló como fabricante local, ofreciendo televisores en blanco y negro y color, pero su verdadero ícono fueron los grabadores de cinta, especialmente los modelos G-256 y G-257, que se volvieron populares por sus teclas de colores, su portabilidad y su capacidad de grabación directa. Estos dispositivos no solo se usaban en hogares: fueron herramientas clave para músicos, periodistas y estudiantes. Bandas pioneras del rock nacional argentino, como Manal, Los Gatos y Pappo’s Blues, utilizaron grabadores Geloso para experimentar con distorsiones y efectos, en una época donde los pedales eran escasos y caros. El sonido crudo y artesanal que lograban con estos equipos se convirtió en parte del ADN del rock argentino. Además, Geloso ofrecía kits de armado para radios y amplificadores, fomentando una cultura de aprendizaje técnico entre jóvenes aficionados a la electrónica. Su presencia en ferias, revistas y escaparates con el logo en tipografía geométrica y los aparatos decorados con florales o detalles metálicos, lo convirtieron en un símbolo de modernidad. Aunque la marca desapareció en los años 70, sus productos siguen siendo objeto de culto entre coleccionistas, y sus grabadores son buscados por su estética retro y su valor histórico. #GelosoRetro #TeclasDeColores #CintaYRock #TecnologíaConEstilo #MadeInItalyAR #mendozantigua 

🌭 “Chori de cancha: sabor popular en los pasillos de River, 1965” — Fútbol, humo y ritual criollo en Núñez

En el año 1965, los alrededores del Estadio Monumental del Club Atlético River Plate, en el barrio de Núñez, se llenaban de humo, voces y aroma a parrilla. Los puestos de venta de chorizos, conocidos popularmente como choripanes, eran parte inseparable del ritual futbolero argentino. No se trataba solo de comida: era identidad barrial, encuentro social y folklore urbano. El choripán, mezcla de pan francés y chorizo asado, se consolidó como el bocadillo emblemático de las canchas en la década del '60, cuando el fútbol comenzaba a convertirse en espectáculo masivo. En River, los días de partido transformaban las calles de Núñez en una feria improvisada: parrillas móviles, carritos de madera, hombres con delantal y gorra, y largas filas de hinchas esperando su porción de sabor criollo antes de entrar al estadio. Según registros del Archivo General de la Nación, estos puestos eran tan populares que incluso fueron fotografiados como parte del paisaje cultural de la época. El choripán no solo alimentaba: marcaba pertenencia, era parte del “pre-partido”, y muchas veces el único lujo gastronómico accesible para miles de fanáticos. El Estadio Monumental, inaugurado en 1938, ya era por entonces uno de los más grandes de Sudamérica. En 1965, River vivía una etapa de transición deportiva, pero fuera de la cancha, el fervor seguía intacto. El choripán, con su mezcla de grasa, humo y pan crocante, era el combustible emocional de cada jornada. #ChoriDeCancha #River1965 #FútbolYParrilla #NúñezPopular #SaborMonumental #mendozantigua 

❄️ "El Barre Nieve en Las Cuevas: rieles entre hielo y altura (Ferrocarril Trasandino, años ’60 – Mendoza)"

El Ferrocarril Trasandino Los Andes–Mendoza, conocido oficialmente en Chile como Trasandino Chileno y en Argentina como Trasandino Argentino, fue una obra monumental que unió las ciudades de Mendoza y Los Andes a través de la Cordillera de los Andes, cruzando por el Paso de Uspallata. Su inauguración oficial tuvo lugar en 1910, y el servicio se mantuvo activo hasta 1984, marcando más de siete décadas de conexión ferroviaria binacional. La iniciativa fue impulsada por los hermanos Juan y Mateo Clark, comerciantes de Valparaíso, descendientes de inmigrantes escoceses. Su objetivo era establecer una vía más eficiente para el intercambio comercial entre el interior argentino y el puerto de Valparaíso, clave en el comercio del Pacífico. Los Clark ya habían tendido en 1871 el primer servicio telegráfico entre Santiago y Mendoza, y su visión modernizadora los llevó a promover esta obra ferroviaria de escala continental. La ejecución del proyecto fue confiada a una firma inglesa, que realizó estudios técnicos para el trazado por el paso cordillerano. La construcción comenzó en 1889, enfrentando enormes desafíos: perforación de túneles en zonas de difícil acceso, transporte de maquinaria especializada desde Europa, condiciones climáticas extremas y complejidades diplomáticas entre ambos países. En 1903, las vías alcanzaron el límite internacional en Villa Las Cuevas, y en 1910 se inauguró oficialmente el servicio. El trazado incluía puentes, túneles y estaciones en altura, con una trocha angosta de 1 metro y una elevación máxima de 3.176 metros sobre el nivel del mar, lo que lo convirtió en uno de los ferrocarriles más altos del mundo. El túnel internacional, de más de 3 kilómetros, fue una de las obras más complejas, perforado con tecnología de vanguardia para la época, incluyendo turbinas hidráulicas y compresores eléctricos. Durante décadas, el Trasandino fue símbolo de integración regional, transporte de carga y turismo de montaña.  El servicio fue clausurado progresivamente: primero el tramo internacional en 1979, luego el transporte de cargas en 1984, y finalmente el servicio local entre Mendoza y Potrerillos en 1992. Hoy, el trazado permanece en estado de abandono. El Trasandino no fue solo una obra de rieles: fue un puente entre culturas, economías y geografías, testimonio del esfuerzo conjunto entre Argentina y Chile por conquistar la montaña con tecnología, visión y voluntad política. #FerrocarrilTrasandino, #TrenDeLosAndes, #HistoriaSobreRieles, #VillaLasCuevas, #MemoriaFerroviaria, #PatrimonioBinacional, #RielesQueUnen, #MendozaHistórica, #CordilleraEnTren, #IngenieríaAndina #Mendozantigua 

🏙️ Avenida San Martín y Las Heras: eje comercial y de tránsito. 🏪 Casa TAP: el supermercado antes del supermercado. ´60

Esta intersección era uno de los nodos más activos del centro mendocino, con fuerte presencia de comercios, transporte público y circulación peatonal. La Avenida San Martín, trazada en el siglo XIX, se consolidó como arteria principal, conectando el centro con Godoy Cruz y Las Heras. En los años 60, ya era un corredor de autos, colectivos y tranvías eléctricos, con paradas centrales y veredas anchas. Casa TAP (Tiendas Argentinas Populares) fue una cadena de autoservicio que funcionaba como precursora de Casa Tía, ofreciendo productos de almacén, bazar y textiles a precios accesibles. Su presencia en San Martín y Las Heras marcaba el inicio de la cultura del consumo masivo, con vitrinas llamativas y carteles luminosos. Era un punto de referencia para vecinos y transeúntes. El tranvía eléctrico circuló por Mendoza entre 1912 y 1966, y en los años 60 aún era el principal medio de transporte urbano, con líneas que conectaban el centro con Las Heras, Godoy Cruz y Guaymallén. En esta esquina, era común ver coches de las líneas 1, 2 y 5, con paradas en el centro de la calzada y circulación compartida con autos. #Mendoza1960 #SanMartínYLasHeras #CasaTAP #TranvíasMendocinos #AutosDeÉpoca #CiudadAntigua #ArchivoVisual #PatrimonioUrbano #MemoriaMendocina #Mendozantigua 

🛼 Patines motorizados a gasolina – Detroit, 1961

El protagonista es Mike Dreschler, un vendedor que en 1961 utilizaba patines motorizados como medio de transporte urbano, y que aparece en la fotografía reabasteciendo combustible en una gasolinera. El dispositivo fue desarrollado por la Detroit Motorized Roller Skate Company, como parte de una serie de inventos experimentales que buscaban revolucionar la movilidad personal. El sistema consistía en un motor de 9 kilos colgado a la espalda del usuario, conectado por cables a los patines. El depósito de gasolina también se llevaba en la espalda. Alcanzaba velocidades de hasta 28 km/h, con una autonomía de 48 kilómetros. Sin embargo, no contaba con frenos ni mecanismos de seguridad, lo que lo hacía extremadamente riesgoso. El conductor debía inclinar el cuerpo para girar y frenar “como pudiera”, lo que convertía cada trayecto en una hazaña de equilibrio y audacia. La escena del vendedor con traje, maletín, patines y motor a cuestas, siendo abastecido en una estación de servicio, es una mezcla de futurismo ingenuo y estética retro. Refleja el espíritu de una época donde la tecnología prometía soluciones audaces, aunque no siempre prácticas. El cartel “CONTAINS LEAD” en el surtidor recuerda que la gasolina con plomo era estándar en ese entonces, antes de su prohibición por razones ambientales. Este tipo de inventos, aunque no prosperaron comercialmente, forman parte del imaginario de la movilidad experimental y del archivo visual de los sueños tecnológicos del siglo XX. #JetRetro, #FuturoVintage, #Detroit1961, #MovilidadPop, #SueñoRodante, #TecnologíaIngenua, #ArchivoCurioso, #PatinesConMotor, #RetroFicción, #GasolinaYEstilo #Mendozantigua 

🚋 Tranvía eléctrico en Mendoza – Escena urbana de 1962

El sistema de tranvías eléctricos en Mendoza comenzó a operar el 1 de octubre de 1912, tras un convenio entre el gobierno provincial y la Empresa de Luz y Fuerza. Reemplazó a los antiguos tranvías a caballo que circulaban por calles como San Martín. En sus primeros años, generó temor por la “alta velocidad” (30 km/h) y el uso de electricidad, pero rápidamente se convirtió en el medio preferido por trabajadores y estudiantes. En su apogeo, el sistema contaba con varias líneas que conectaban: Godoy Cruz con Las Heras (Línea 1). Centro con San José (Guaymallén) (Línea 5). Barrios periféricos como Villa Nueva, Dorrego y El Bermejo. Las paradas se ubicaban en el centro de la calle, y el espacio entre vías se usaba para estacionar autos. El conductor era conocido como “motorman”, y operaba el vehículo mediante una palanca que regulaba el flujo eléctrico. Los coches tenían una parrilla metálica frontal, llamada “salvavidas”, para evitar accidentes con peatones. Su diseño era sobrio, funcional, y en muchos casos pintado en tonos azul y blanco, como el que aparece en tu imagen. A pesar de su popularidad, el sistema comenzó a mostrar signos de obsolescencia en los años 50. La falta de inversión, el deterioro del material rodante y el auge de los colectivos llevaron a su desactivación definitiva en enero de 1966. La diapositiva de 1962 representa una etapa final del tranvía mendocino, cuando aún convivía con autos clásicos, motocicletas y arquitectura urbana. Es una escena de transición, donde el tranvía sigue siendo protagonista, pero ya se percibe el cambio hacia un modelo más motorizado y descentralizado. #TranvíaMZA #Mendoza1962 #ArchivoUrbano #MemoriaVial #TransporteHistórico #CiudadAntigua #PatrimonioMZA #RielesYRecuerdos #MovilidadRetro #HistoriaVisual #Mendozantigua (Fuente: https://dp.la/thumb/b96d8729754d2106088777bf0a319cc3)

🎬 “Cuando el terror tenía alas: el caos detrás de Los pájaros (1963)”

La película Los pájaros (1963), dirigida por Alfred Hitchcock, marcó un antes y un después en el cine de terror, no solo por su atmósfera inquietante, sino también por la complejidad de su producción. El proyecto combinó técnicas cinematográficas tradicionales con efectos especiales pioneros, enfrentando desafíos técnicos y logísticos que reflejaban la ambición del director. Uno de los mayores retos fue dar vida a los verdaderos protagonistas: las aves. Para ello, se recurrió a una mezcla de aves vivas entrenadas, modelos mecánicos y efectos ópticos, cada uno con sus propias dificultades. El entrenador Ray Berwick estuvo a cargo de miles de ejemplares, entre ellos gaviotas, cuervos y gorriones. Los cuervos, por su inteligencia, fueron especialmente difíciles de capturar, y se necesitó localizar un gran nido en Arizona. Las gaviotas, por su parte, mostraron comportamientos agresivos, llegando a atacar a actores y técnicos, lo que provocó varias lesiones. Para calmar a algunas aves, se utilizó una controvertida técnica: alimentarlas con trigo empapado en whisky, algo impensable hoy en día. Además, la presencia masiva de pájaros en el set trajo consigo una plaga de piojos que afectó al equipo. Inicialmente, se invirtieron más de 200.000 dólares en el desarrollo de aves mecánicas motorizadas, pero su apariencia poco realista llevó a que se usaran solo en escenas puntuales, como los tortolitos en el auto de Tippi Hedren o la gaviota que ataca a una niña en una fiesta. El resultado final, sin embargo, logró transmitir una sensación de amenaza latente que convirtió a Los pájaros en un clásico indiscutible del género. #LosPájaros1963 #HitchcockClásico #CineDeTerror #EfectosEspeciales #HistoriaDelCine #SetLegendario #TerrorNatural #CineConAves #SuspensoVisual #MaestroDelSuspenso #Mendozantigua