Cargando en un ramal férreo de 700 metros de largo el vino en el interior de la Bodega de Domingo Tomba. Godoy Cruz. Mendoza (1910)

En el patio principal de la bodega de Godoy Cruz, rodeado de flores, se levantaba un pequeño monumento en bronce, al fundador é iniciador de la casa, don Antonio Tomba, (1849-1899) fallecido en el preciso momento que, secundado por dos de sus hermanos, y especialmente por don Domingo, veía culminar su obra. La bodega principal en Godoy Cruz, ocupaba una extensión de 59.000 metros cuadrados, teniendo 41 salones de depósito y conservación, con 631 vasijas y piletas, cuya capacidad general alcanzaba á 110.300 hectólitros. Existían 54 toneles de roble de 300 hectólitros cada uno, 144 de 210; 188 de 100; 113 de 50; 1 pileta de cemento para 1.200; 21 para 700; 35 para 130; 1 para 460 y 74 para 250. Para la fermentación disponía de 437 cubas, con capacidad para 43330 hectólitros, distribuídos en esta forma: 20 de 250, 60 de 165, 79 de 110, 146 de 90, 132 de 50. Un ramal férreo de 700 metros de largo, de propiedad del establecimiento, penetra en el interior del mismo, atracando los vagones hasta las planchadas de carga de la sección expedición. Para el transporte de la uva, contaba con 93 tanques de 10 hectólitros cada uno, colocados sobre chatas, más 182 carros, 1180 mulas, 90 caballos y 110 bueyes. La tonelería mecánica podía alistar 1000 bordalesas diarias contando con numeroso personal. Existían también las secciones de carpintería, taller mecánico, fundición de bronce, laboratorio químico-enólogo. Es aquello un verdadero pueblo industrial, presidido por un gobierno de orden y una administración modelo. En 1909, adquirió el señor Tomba el establecimiento llamado De Buena Nueva, de construcción moderna, uno de los mejores instalados de la provincia, con una capacidad para elaborar y conservar 70.000 hectolitros de vino. Era conocido con el nombre de El Sauce.