domingo, 12 de octubre de 2025

La Basílica del Pilar, inaugurada el 12 de octubre de 1732 en Recoleta, es una joya del barroco colonial argentino. Su historia combina devoción, arte, expulsiones, restauraciones y un legado patrimonial que sigue brillando en pleno corazón de Buenos Aires.


La actual Basílica Nuestra Señora del Pilar, ubicada en el barrio de Recoleta, fue originalmente el templo del Convento de los Franciscanos Recoletos, construido en los extramuros de la ciudad para preservar el recogimiento de la orden. El proyecto fue impulsado por el capitán Pedro Bustinza en 1705, pero recién autorizado en 1716 por el rey Felipe V. Tras la muerte de Bustinza, el comerciante Juan de Narbona financió la obra, solicitando que se consagrara a la Virgen del Pilar, patrona de su ciudad natal, Zaragoza. La construcción comenzó en 1724 bajo el arquitecto jesuita Andrés Blanqui, y fue finalizada por Juan Bautista Prímoli. El templo fue inaugurado el 12 de octubre de 1732 y consagrado en 1734. En 1821, los frailes fueron expulsados por orden de Bernardino Rivadavia, y el convento quedó abandonado. En su huerta se fundó el Cementerio de la Recoleta, y más tarde el Centro Cultural Recoleta. Desde 1829, la iglesia funciona como parroquia. En 1936 fue elevada a basílica menor por el papa Pío XI, y en 1942 fue declarada Monumento Histórico Nacional. El templo tiene una sola nave con crucero y bóveda vaída. Su altar mayor, de estilo barroco, está ricamente decorado en plata con influencias del Alto Perú. La talla de San Pedro de Alcántara se atribuye a Alonso Cano, y el Altar de las Reliquias habría sido donado por Carlos III. Uno de los altares más destacados, el de la Virgen de los Dolores, fue restaurado en el año 2000. Se descubrieron colores vibrantes y técnicas originales, como el uso de óleos europeos prefabricados y dorado al agua con láminas de oro de 24 kilates. La restauración reveló una riqueza estética inédita en retablos argentinos. La fachada presenta pilastras dobles, una espadaña con reloj inglés de Thomas Windmill (el primero de la ciudad), y una torre revestida con azulejos traídos de Calais en 1866. El conjunto incluye una cripta y el espacio de “Los Claustros”, hoy convertido en museo.#BasílicaDelPilar #Recoleta1732 #ArteColonial #PatrimonioVivo #VirgenDelPilar #Mendozantigua 

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