jueves, 10 de septiembre de 2020

El 10 de septiembre de 1891, en Stepanice, Imperio Ruso, actual Ucrania, nacía el extremista y militante obrero anarquista Simón Radowitzky, quién se hizo conocido por asesinar en Argentina al jefe de la policía de Buenos Aires Ramón Falcón. (EH)

Hijo de obreros judíos, eludió la educación formal para iniciarse como aprendiz en una herrería, donde la hija de su maestro le inculcó el anarquismo como único medio del desarrollo obrero, anhelando la desaparición de toda autoridad, jerarquía o control, o sea, del estado. Comenzó a participar en marchas obreras y repartir prensa de resistencia, tras la represión zarista de 1905 decidió emigrar para evitar ser enviado a Siberia. Recaló en Argentina ya que había una nutrida congregación de obreros de origen ruso que lo ayudaron a afincarse en Campana y conseguir trabajo en el Ferrocarril Central Argentino. Estando en Buenos Aires, por convocatoria de las centrales UGT y FORA asistió al acto del 1 de mayo de 1909, a celebrar el "Día del trabajador". Ramón Falcón, jefe de la policía, ordenó una inexplicable y brutal represión que provocó 8 muertes, además prosiguió con la persecución y detención de numerosos dirigentes anarquistas y obreros, en la llamada "Semana Roja". Radowsky decidió devolver el golpe con la misma irracionalidad y violencia, el 14 de Noviembre asesinó a Falcón y a su asistente Lartigau arrojando una bomba casera a su carruaje. Perseguido por la policía intento suicidarse pero falló y fue detenido, confesó su solitaria autoría pero sorpresivamente no recibió la esperada pena de muerte, fue confinado a cadena perpetua en el penal de Ushuaia. Luego de 21 años de prisión y un par de escapes frustrados, el presidente Hipólito Yrigoyen le concede el indulto pero al mismo tiempo lo condena al destierro instalándose en Montevideo. Allí retomó su profesión de herrero y pese a no involucrarse en nuevos conflictos en 1934 fue encarcelado por sus antecedentes. En 1935 solicita la libertad para radicarse en España, y tener una breve participación en las brigadas anarquistas internacionales que participaron en la Guerra Civil Española. Con el triunfo de Franco se refugió en Francia hasta conseguir un salvoconducto para trasladarse a México, donde el poeta Uruguayo Angel Falco le consiguió residencia y trabajo. El resto de su vida lo pasó alejado de las agitaciones trabajando en una fábrica de juguetes hasta que la muerte lo alcanzó el 29 de Febrero de 1956.

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