👔 1 de noviembre de 1919: El guardapolvo blanco se convierte en símbolo de igualdad y educación pública en Argentina

Aunque su uso se popularizó décadas antes, fue recién el 1 de noviembre de 1919, durante el primer gobierno de Hipólito Yrigoyen, cuando el guardapolvo blanco fue reconocido oficialmente como el “uniforme característico del traje escolar” en las escuelas públicas argentinas. Desde entonces, esta prenda sencilla y austera se transformó en un emblema de la educación gratuita, laica y universal, con más de un siglo de vigencia. La historia del guardapolvo no es lineal ni atribuible a una sola figura. Aunque algunos lo vinculan con Domingo Faustino Sarmiento, la Ley 1420 de 1884 —que estableció la educación obligatoria— prohibía expresamente el uso de uniformes escolares. Fue recién en 1915, cuando la maestra Matilde Filgueiras de Díaz, de la escuela Cornelia Pizarro en Buenos Aires, propuso que todos los alumnos usaran una prenda blanca sobre la ropa para evitar diferencias sociales visibles. La tela blanca, económica y accesible, fue elegida por consenso entre docentes y familias. En paralelo, médicos higienistas como Genaro Sisto y Genaro Giacobini promovieron el uso de delantales blancos como medida sanitaria y moral. Giacobini, además, impulsó subsidios para proveer alimentos, útiles y ropa —incluyendo guardapolvos— a los estudiantes de zonas vulnerables como Parque Patricios y Pompeya. La Circular del Consejo Nacional de Educación del 1 de noviembre de 1919 formalizó la recomendación del guardapolvo blanco para alumnos y docentes, aunque su obligatoriedad legal no está claramente documentada. Según investigaciones de Flavia Fiorucci y José Bustamante Vismara, es probable que su uso se haya consolidado por costumbre institucional y presión social, más que por decreto. Durante las décadas de 1930 y 1940, el Estado organizó campañas de donación de guardapolvos, y para 1942 su uso era prácticamente universal en escuelas públicas. En contraste, las escuelas privadas adoptaron uniformes oscuros inspirados en modelos británicos. En 1966, el programa televisivo Jacinta Pichimauida, la maestra que no se olvida popularizó la expresión “blancas palomitas”, usada por el portero Efraín (interpretado por Vicente Ariño) para referirse a los alumnos. Desde entonces, el guardapolvo blanco quedó asociado no solo a la escuela, sino también a la nostalgia, la infancia y la promesa de igualdad. #Scroll1919 #GuardapolvoBlanco #EducaciónIgualitaria #PalomitasDeHistoria #EscuelaYMemoria #mendozantigua