🌍 Espina Bífida y Hidrocefalia: dos desafíos, una causa compartida
Cada 25 de octubre, se celebra el Día Mundial de la Espina Bífida y la Hidrocefalia, establecido en 2011 por la Federación Internacional de Espina Bífida e Hidrocefalia (IFSBH). El objetivo es concientizar, promover derechos y mejorar la calidad de vida de quienes conviven con estas condiciones, que suelen estar interrelacionadas desde el nacimiento. La espina bífida es un defecto del tubo neural que ocurre en las primeras semanas del embarazo, cuando la médula espinal y la columna vertebral no se cierran correctamente. Sus formas van desde leves (como la espina bífida oculta) hasta severas, que implican daño neurológico, exposición de meninges y dificultades motoras, urinarias o intestinales. La hidrocefalia, por su parte, es una acumulación anormal de líquido cefalorraquídeo (LCR) en el cerebro, que genera presión intracraneal y puede dañar el tejido cerebral. Puede ser congénita o adquirida, y sus causas incluyen obstrucciones, mala absorción o sobreproducción del LCR. Ambas condiciones están estrechamente vinculadas: la mayoría de los bebés con espina bífida también desarrollan hidrocefalia, especialmente en sus formas abiertas. Esto se debe a malformaciones cerebrales que dificultan el drenaje del líquido. En Argentina, la Ley 25.630 promueve la prevención de malformaciones del tubo neural mediante la fortificación con ácido fólico, una medida clave para reducir el riesgo de espina bífida. Este día mundial no solo busca informar, sino también reclamar inclusión, accesibilidad y atención médica especializada, reconociendo que detrás de cada diagnóstico hay una historia de lucha, adaptación y dignidad. Fecha oficial: 25 de octubre, desde 2012. Institución promotora: International Federation for Spina Bifida and Hydrocephalus (IFSBH). En Argentina, la Ley 25.630 promueve la prevención con ácido fólico. #ScrollNeural #25OctubreVisible #EspinaYAgua #NeurodiversidadConDerechos #CerebroYColumna
No hay comentarios.:
Publicar un comentario