El 28 de Junio de 1919, se firmaba el documento que ponía fin a la Primera Guerra Mundial, hecho que las potencias vencedoras aprovecharon para arrodillar a los vencidos y quedarse con sus recursos naturales, rentas y riquezas, ese día se firmaba el "Tratado de Versalles". (EH)

El 28 de Junio de 1914 en Sarajevo, era asesinado el Archiduque Francisco Fernando de Austria, empujando al Imperio Austrohúngaro a una guerra con Serbia que gatilló una serie de apoyos y pactos preexistentes, iniciando una escalada bélica que dio origen a la Primera Guerra Mundial. Luego de 4 años de un sangriento conflicto que costó la vida a más de 10 millones de personas y dejó más de 20 millones de heridos y mutilados, fue Alemania la gran derrotada. La alianza vencedora de Francia, EEUU y el Reino Unido vieron una oportunidad de atar el castigo ejemplar a sus enemigos con suculentos beneficios económicos, pero sin sospechar que crearían las bases para el nacimiento de un monstruo aún peor. Pese a que las armas se acallaron en Diciembre de 1918, las abusivas condiciones de la rendición provocaba rechazos dentro de la población alemana, pero la amenaza de una prolongación del conflicto los obligó terminar con las negociaciones y aceptar la ley de los ganadores. Para la firma se eligió simbólicamente la misma fecha que el hecho que originó la guerra, el 28 de Junio de 1919 en la Galería de los Espejos del Palacio de Versalles, Alemania se rindió formalmente firmando el armisticio. El tratado significaba la aceptación alemana de ser el responsable del conflicto y sus consecuencias, perdió el 15% de su territorio europeo previo a la guerra, debió renunciar a todas sus colonias que fueron repartidas entre los vencedores, incluso las industrias y posesiones de particulares en esos territorios. Debió entregar todo su material bélico de tierra, se enajenó toda su flota de guerra y los barcos mercantes mayores a 1400 Tn de peso, además de obligarlo a fabricar barcos por 200.000 Tn anuales a ser entregados a sus vencedores hasta reponer todo barco perdido durante el conflicto sin importar quién lo haya hundido. Anualmente y por 5 años, debía entregar 44 millones de toneladas de carbón, 370 mil cabezas de ganado, la mitad de su producción farmacéutica, química e hidrocarburífera, así como la entrega de toda propiedad privada de alemanes en el exterior, anulación de aranceles de importación y tránsito de mercancías fabricadas por los vencedores. Debió suprimir las fuerzas armadas, no permitiéndose-le fabricar armas de ningún tipo ni entrenar fuerzas policiales de elite. Fue condenado a pagar (en valores actuales) 450 mil millones de dólares, que con su producción agrícola y ganadera embargada y su industria enajenada le era imposible. Esta situación generó el nacimiento de fuerzas nacionalistas que se negaban a cumplir el tratado y se fueron volviendo mas extremistas hasta que en 1933 tuvo como respuesta el nazismo que relanzó la industria de guerra y suspendió los pagos, estos no se reanudaron hasta que Alemania se reunificó terminando de pagar los intereses en 2012.