El 1 de diciembre de 1983, en Nueva York, se estrenó la película “Scarface” (Caracortada), dirigida por Brian De Palma y producida por Universal Pictures, con guion de Oliver Stone inspirado en la novela de Armitage Trail.

La cinta, protagonizada por Al Pacino junto a Steven Bauer, Michelle Pfeiffer, Robert Loggia y F. Murray Abraham, se convirtió en un clásico del cine criminal y en una de las representaciones más crudas del ascenso y caída de un gánster. La historia sigue a Tony Montana, un inmigrante cubano que llega a Miami con ambición desmedida y, junto a su amigo Manny Rivera, inicia una carrera delictiva en el tráfico de cocaína que lo lleva a la cima del poder, pero también a su inevitable destrucción. La música de Giorgio Moroder, con sintetizadores característicos de los años 80, reforzó la atmósfera intensa y decadente del filme. El proyecto nació cuando el productor Martin Bregman decidió actualizar la versión original de Scarface (1932), trasladando la acción de Chicago a Miami y dedicando la película a Howard Hawks y Ben Hecht, responsables del clásico inicial. Para modernizar el guion, Oliver Stone se instaló en Miami, entrevistó a inmigrantes cubanos y traficantes, y plasmó un retrato realista del narcotráfico, aunque en ese proceso cayó en la adicción a la cocaína, de la que luego se recuperó en París. El papel de Tony Montana fue ofrecido inicialmente a Robert De Niro, pero finalmente recayó en Al Pacino. Steven Spielberg, amigo de De Palma, dirigió sin crédito algunas escenas clave, incluido el tiroteo final. La MPAA calificó inicialmente la película con una “X” por su violencia explícita; tras apelaciones y cortes, se le otorgó una “R”. De Palma, sin embargo, distribuyó la versión original sin avisar, lo que se descubrió años después. El filme fue criticado en su estreno por su brutalidad, pero con el tiempo se convirtió en un ícono cultural, influyendo en la música hip-hop y en la estética del cine criminal. Según el American Film Institute, Scarface es considerada una de las películas más influyentes del siglo XX. Incluso figuras políticas como Saddam Hussein se declararon fanáticos del filme, llegando a nombrar una de sus corporaciones internacionales como Montana Management, en referencia al personaje de Pacino. Hoy, Scarface es recordada como una obra que retrata la ambición desmedida, el poder y la corrupción, y que consolidó a Al Pacino como uno de los grandes actores de su generación. #Scarface1983 #TonyMontana #AlPacino #BrianDePalma #OliverStone #CineCriminal #UniversalPictures #CineClásico #CulturaPop #HistoriaDelCine #Mendozantigua