Con mucho entusiasmo un grupo de ingleses organizó el primer partido de fútbol que se jugaría en el territorio argentino. El mismo se llevaría a cabo en el barrio de La Boca el 25 de mayo de 1867. ¿Por qué se tomó ese día? Porque era feriado. Pero la lluvia arruinó el estreno. La próxima fecha disponible era el 20 de junio y además se cambió el escenario. En vez de La Boca con sus problemas de inundación, resolvió utilizarse el terreno del Buenos Aires Cricket Club, en Palermo, donde hoy se encuentra el Planetario.
La convocatoria era para las 12:30. Esta vez el tiempo acompañó; sin embargo, surgió un nuevo inconveniente: varios de los que se habían comprometido a participar abandonaron a último momento debido a la sorpresiva cantidad de público que concurrió a Palermo. Les dio vergüenza ser vistos corriendo una pelota delante de tanta gente. Por lo tanto, en vez de once contra once, hubo ocho jugadores por equipo. Aquel primer encuentro futbolístico duró dos horas y los contrincantes no se diferenciaban por la camisa (a nadie se le hubiera ocurrido usar camisetas en ese tiempo), sino por el color de las boinas: blancas de un lado, rojas del otro.
Ganó el equipo de las boinas coloradas, 4 a 0. Los vencedores fueron Thomas Hogg (capitán), James Hogg, Thomas Barlow Smith, William Forrester, James Wensley Bond, E. S. Smith, Norman Harry Smith y John Ramsbotham.
Los boinas blancas fueron Walter Heald, Herbert Thomas Barge, Thomas Best, Urban Smith, John Harry Wilmott, R. Ramsay, J. Simpson y William Boschetti.
Pasaron 30 años hasta que los ex alumnos del Buenos Aires English High School formaron un equipo al que llamaron Alumni, como solían denominarse las asociaciones de ex alumnos en los Estados Unidos. Es sabido que Alumni (la foto que vemos es de 1902) fue el gran campeón de fútbol en los comienzos del siglo XX y se convirtió en la base de los primeros seleccionados argentinos. Pero el detalle está en los colores que usó. Fueron, justamente, el colorado y el blanco que recordaba a aquellas boinas del primer partido en 1867.
Los colores históricos se mantuvieron en la camiseta del popular club de rugby Alumni. Mientras que en el fútbol fueron los elegidos por un grupo de estudiantes platenses, deportistas cordobeses y también santafesinos que admiraban a sus pares porteños y querían tener sus mismos colores. Nos referimos a Estudiantes de la Plata, Instituto de Córdoba y a Unión de Santa Fe.
River Plate, en cambio, eligió esos colores porque son los de la bandera de Génova, ya que el club se formó en el típico barrio de los genoveses: La Boca, donde estuvo por jugarse el primer partido de nuestra historia, pero se supendió por lluvia.
Fuente: Historiador Daniel Balmaceda