El 4 de noviembre, a las 10, el Consulado de Italia en Mendoza, realizará en la Plaza Italia, un homenaje a los caídos en la Gran Guerra, al conmemorarse además, el centenario de ese país en el conflicto bélico. Además de este acto, ese mismo día a las 21, en la Nave Universitaria (Parque Central), la Orquesta Sinfónica de la UNCuyo, dirigida por el Maestro Rodolfo Sagliambeni, brindará un concierto denominado "Concerto Per la Pace".
En noviembre de 1915, cuando Italia entró en la guerra, miles de italianos residentes en todo el país, partieron voluntariamente para defender su patria.
Desde muy niño, mi familia paterna comentaba que el hermano de mi abuelo -Pasquale Campana- había dejado Argentina, para combatir en aquella contienda mundial. Recuerdo que en un sector de la habitación de mis abuelos, se encontraba un viejo arcón. Y en su interior había una caja de madera que contenía algunas cartas y fotografías que confirmaban la heroica aventura.
Las cartas -que eran de cartulina- se encontraban muy amarillas por el paso de los años, pero se podían leer sin dificultad en idioma italiano. Fueron pasando los años y aquel pequeño tesoro -que conservamos a pesar del paso del tiempo- hizo que pudiéramos reconstruir esta historia.
Hacer la América
Pasquale, como muchos de los italianos que llegaron a nuestro país, nació a finales del siglo XIX, en un pequeño pueblo de Cosenza llamado Mandatoriccio, en la región de Calabria. La difícil situación económica y social que atravesaba Italia, hizo que con 18 años tomara una determinación en su vida. Trabajó lo suficiente para ahorrar dinero y comprarse un pasaje para viajar a Sudamérica.
Pasquale, como muchos de los italianos que llegaron a nuestro país, nació a finales del siglo XIX, en un pequeño pueblo de Cosenza llamado Mandatoriccio, en la región de Calabria. La difícil situación económica y social que atravesaba Italia, hizo que con 18 años tomara una determinación en su vida. Trabajó lo suficiente para ahorrar dinero y comprarse un pasaje para viajar a Sudamérica.
Fue justamente Argentina que eligió para establecerse. En 1908, partió desde Genova, en el vapor Italia con rumbo al puerto de Buenos Aires, en donde desembarcó un mes después.
Al poco tiempo, y con muchos sueños, el joven italiano, aprendió rápidamente el idioma español y se adaptó a la cultura argentina; trabajó duro para tener una mejor pasar y lo logró, al iniciarse en la vida comercial.
El festejo del centenario de la Revolución de Mayo, sorprendió a Pasquale quien lo vivió de una manera muy especial. Para él, había una inmensa prosperidad en el país y su negocio marchaba muy bien, al punto que tenía pensado viajar a Italia de paseo... pero llegaron malas noticias desde Europa, porque Alemania había declarado la guerra a Francia y también a Gran Bretaña y otros países se involucraron en el conflicto. Quedaban algunas naciones como la península itálica que permanecían neutrales, pero en 1915, Italia también entró en la conflagración.
Soldados reales
Cuando llegó la noticia que Italia había entrado en guerra, miles de italianos de todo el país, partieron hacia la embajada de ese país en Buenos Aires y se enrolaron en la oficinas de reclutamiento.
Cuando llegó la noticia que Italia había entrado en guerra, miles de italianos de todo el país, partieron hacia la embajada de ese país en Buenos Aires y se enrolaron en la oficinas de reclutamiento.
Como muchos de sus compatriotas, Pasquale decidió sumarse y partió hacia su lugar de origen.
En Italia, regresó a su pueblo y se alistado en el distrito de Castrovillariò. Luego, se incorporó en el Regimiento de infanteria N° 63 Brigada "Cagliari".
En agosto de 1916, esta brigada partió desde el puerto de Taranto hacia Tesalónica. Las fuerzas italianas tenían como objetivo defender el sector Kruscia-balcánica, al este del lago Doiran: una línea de unos 50 kilómetros, particularmente expuesta a los ataques de los búlgaros.
En agosto de 1916, esta brigada partió desde el puerto de Taranto hacia Tesalónica. Las fuerzas italianas tenían como objetivo defender el sector Kruscia-balcánica, al este del lago Doiran: una línea de unos 50 kilómetros, particularmente expuesta a los ataques de los búlgaros.
El soldado Campana, participó en batalla como la conquista del Monte Velusina y la toma de la ciudad de Brathindol. Estas sangrientas luchas se cobraron, en pocos días, miles de italianos muertos.
En setiembre de 1918, unos días antes que las fuerzas italianas vencieran a los ejércitos Austro-húngaro y demás aliados, Pasquale, fue gravemente herido y trasladado al hospital militar en Salónica, Macedonia.
Su sueño era volver a Argentina, pero luego de varios meses de agonía, falleció el 29 de abril de 1919. Su cuerpo fue enterrado en el cementerio militar de Zeytinlink en donde hoy descansa junto a 3.000 compatriotas, 8.000 franceses, 2.000 británicos y alrededor de 500 rusos.
Soldados de infantería del regimiento n°63, Brigada Cagliari. Pascuale Campana (arriba a la derecha)
Italianos de Mendoza que cayeron en la guerra
Muchos italianos radicados en nuestra provincia, se enrolaron con el fin de pelear en la guerra a fines de 1915. Ubicados en diferentes frentes de batalla, fueron muchos los que murieron en combate.
Entre los caídos en acción se econtraban: Andrés Alterio; José Beri, Atilio Badaloni, Ferdinando Bassi, Miguel Ángel Contarelli, Santo Di Pasquale, José Di Primo, Cayetano Di Salvo, Rosario Gianmarinaro, Alberto Grazzini Bono, Juan Gullo, José Gullo, Juan Lammacchia, Nicolás Lo Pomo, Miguel Micheletti, Cayetano Morelli, Agostino Mula, Juan Malagrino, Santo Oliva, Luis Raguini, Salvador Randiero, Salvador Riil, José Rizzo,Sebastián Smeriglio, José Trimbolli, Enrique Vercilli. Los nombres de estos hombres valientes quedaron en el corazón de muchos mendocinos que tuvieron la suerte de conocerlos.
Fuente: http://www.losandes.com.ar/article/cuando-el-deber-llama
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