Por Carlos Campana. Para el Ciudadano Diario
El 13 de Diciembre, se conmemora la repatriación a la provincia de Mendoza de los restos de Mercedes Tomasa de San Martín, Mariano González Balcarce y Buchardo y María Mercedes González Balcarce, hija y familiares directos del General José de San Martín. Esta ceremonia tuvo como protagonista al pueblo mendocino quien le rindió honores. Mercedes, hija de Mendoza El 24 de agosto de 1816 nació en la Ciudad de Mendoza, Mercedes Tomasa, la única hija del Libertador, quien por aquellos momentos estaba abocado en la formación del Ejército de los Andes y que fue creado por decreto del director Supremo de las Provincias Unidas del Sud, Juan Martín de Pueyrredón, con el objetivo de marchar a liberar Chile, que en ese momento, estaba en manos de los realistas. La infanta mendocina fue bautizada el 31 de agosto de ese año en la iglesia matriz por el vicario general castrense Lorenzo Güiraldes y fueron sus padrinos doña María Josefa Álvarez de Delgado y el mayor José Antonio Álvarez Condarco. Tiempo después Mercedes partió con su madre hacia Buenos Aires en donde residió en la casa de sus parientes. En 1824, cuando era una niña, viajó con su padre hacia Europa en donde vivió gran parte de su vida. Primero, estuvo en el Reino Unido por unos meses, luego residió cinco años en Bruselas, capital de Bélgica para luego radicarse definitivamente en Francia. Allí se casó con el diplomático y médico Mariano González Balcarce.
La mendocina tuvo dos hijas: una nació en Buenos Aires el 14 de octubre de 1833 con el nombre de María Mercedes, quien vivió en Francia y murió de mala praxis el 21 de mayo de 1860 en ese país, a la edad de 26 años. Su otra hija menor llamada Josefa Dominga y apodada Pepa, nació en Grand Bourg, el 14 de julio de 1836 y con el tiempo se transformó en una reconocida dama que practicó la filantropía junto a su esposo el diplomático mexicano Fernando Gutiérrez de Estrada (1833 -1904). Además, doña Pepa tuvo gran incidencia en la sociedad francesa, al poner en servicio durante la Primera Guerra Mundial su chateau como hospital militar, por lo que fue condecorada por el gobierno galo y falleció en ese país, el 17 de abril de 1924. Por muchos años, una calle de la localidad de Brunoy llevó su nombre. Merceditas realizó una gran actividad como artista plástica y tuvo una gran participación a nivel social junto a su marido. La hija del vencedor de Maipú, falleció en Brunoy (Francia) el 28 de febrero de 1875. También debemos destacar la labor diplomática que tuvo Mariano González Balcarce y Buchardo durante más de 50 años, representando a nuestro país en Europa. Con 78 años de edad falleció en la misma ciudad como la mayoría de su familia, el 20 de febrero de 1885.
Un siglo fuera de su provincia
El 24 de octubre de 1949, el Gobierno nacional promulgó la ley 13.661, en donde se declaró el año de 1950 como el Año del Libertador General San Martín, en homenaje al centenario de su fallecimiento. La ley fue sancionada por el Congreso nacional y en el artículo 4º mencionaba como principal objetivo, el repatriar desde Francia los restos de la hija del Libertador, Mercedes, su yerno Mariano Balcarce y su nieta mayor María Mercedes para que descansasen en la provincia de Mendoza. En esa ley, también mencionaba la formación de una comisión con ese fin.
Mientras tanto, un año después en nuestra provincia, se inició en noviembre la construcción del mausoleo a través de los fondos del Ministerio de Economía, Obras Públicas y Riego. El proyecto fue diseñado por el arquitecto Alberto Belgrano Blanco y la obra costó unos 100.000 pesos moneda nacional de aquel tiempo. Se eligió el sitio de la Basílica de San Francisco por tener varios antecedentes históricos sanmartinianos, y así lo determinó esa comisión. El monumento está construido con mármol travertino color ocre de la zona, de unos 3 metros de altura y con un fondo de cerámica azul realizada en nuestra provincia, con las imágenes en bronce de Mercedes de San Martín y Mariano Balcarce con detalles de guirnaldas y un escudo argentino como adorno.
La expatriación de sus restos
El 16 de mayo de 1951 partió desde el puerto de Buenos Aires hacia Europa el crucero acorazado ARA Pueyrredón, al mando del Capitán de Fragata Alicio Ogara.
El objetivo de este viaje en realidad era el de la instrucción de los nuevos cadetes de la Escuela Naval Militar, con un periplo por diferentes países europeos y haciendo escala en Pernambuco, Dakar y Santos comprendiendo en total unas 20.000 millas de navegación.
Entre otras misiones tenía la de buscar los restos de la hija, el yerno y una de sus nietas de la familia del Libertador, José de San Martín. En el mes de octubre, su capitán y su tripulación recibieron los restos de Mercedes, Mariano y María Mercedes que habían sido exhumados del mausoleo familiar en el cementerio de Brunoy y trasladados luego a la Costa Azul y de allí a la Argentina. En esa oportunidad, el gobierno francés impidió el traslado de los restos de Josefa Dominga, nieta menor del Libertador por ser ciudadana francesa. El 11 de diciembre, los despojos mortales fueron recibidos por el entonces presidente de la Nación Juan Perón junto a sus ministros y otros funcionarios en el puerto de Buenos Aires, tras una breve ceremonia, fueron depositados transitoriamente en la sede del Instituto Nacional Sanmartiniano. Al día siguiente, desde la sede de la institución, los restos de Mercedes, Mariano y María Mercedes fueron trasladados hacia la estación del ferrocarril General San Martín en Retiro. Durante la previa, tuvo una emotiva ceremonia que se desarrolló con la participación de efectivos del Regimiento de Granaderos a Caballo quienes junto a los altos jefes de las Fuerzas Armadas y el público se hicieron presentes en la avenida Libertador para homenajear a los familiares del Padre de la Patria. Por aquella arteria, circulaba un carro de asalto que transportaba en una cureña las urnas funerarias, seguidas por cuatro carrozas que llevaban ofrendas florales de instituciones oficiales. Además, acompañaban al cortejo varias secciones de diferentes armas de Ejército y la Marina. Al llegar a la estación de Retiro, los restos fueron depositados en un tren especial que partió a las 11.50 horas con destino a la Ciudad de Mendoza. Entre los pasajeros se encontraban funcionarios públicos nacionales y provinciales que acompañaban los restos de los familiares del Libertador.
Recibimiento popular
En la mañana del jueves 13 de diciembre llegaron a la capital mendocina aquellas reliquias fúnebres que fueron recibidas por las autoridades provinciales encabezadas por el gobernador Blas Brisoli y una gran cantidad de púbico convocado para ese evento.
Las urnas fueron ubicadas en una cureña trasladada por un carro de enlace del Ejército Argentino quien se dirigió por varias calles de la ciudad acompañado por una multitud que se agolpó en las veredas. Durante el cortejo fúnebre, participaron del evento tropas del Ejército, la Fuerza Aérea con asiento en Mendoza y cadetes del Liceo Militar General Espejo. Ya en la vieja Casa de Gobierno –ubicada en calle Rivadavia– se organizó la capilla ardiente en el Salón Rojo, para que los ciudadanos pudieran ver los restos de la infanta mendocina y sus familiares. Al día siguiente, los despojos mortales de los tres familiares del Libertador fueron depositados en el mausoleo interno en la Basílica de San Francisco, en donde hoy descansan.
(https://www.ciudadanodiario.com.ar/cultura/el-regreso-de-mercedes-de-san-martin-a-su-tierra-natal)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario