Sería extraño imaginarse una película de James Bond con estética infantil o a los Power Rangers con un guion para adultos. Sin embargo en 1967, los británicos Gerry Anderson y Sylvia Thamm le dieron vida al "Capitán escarlata". A principio de los años '60 se pusieron de moda series para niños totalmente protagonizadas por marionetas. Supercar y Thunderbirds fueron pioneras en esta estética. Creados por el matrimonio Anderson-Thamm para el público infantil causaron sensación en la TV inglesa. Durante la serie Thunderbirds perdieron el rumbo y agregaron algunos tips que excedían la comprensión de los niños. Los directivos de la "ATV" (Associated Television), los citaron para una reunión. Lo que empezó como un pedido de explicaciones fue mutando en una nueva idea. Anderson y Thamm hacen una proposición que sería como dar un salto al vacío. Arriesgando todo su prestigio deciden crear una ambiciosa serie de ciencia ficción protagonizada por marionetas. Si iban a llevar adelante una serie con lenguaje, temática, nivel de violencia para un adulto pero con estética infantil necesitaban un sólido guion. Tony Barwick le dio un sustento técnico y científico revolucionario para la época. Recopilaron información sobre adelantos tecnológicos recientes y posibles logros científicos próximos para dar una atmósfera futurista. En septiembre de 1967 se estrenaba el primer capítulo de "Captain Scarlet and the Mysterons", provocando estupor, amores y odios. La historia centrada en la lucha entre la agencia internacional Spectrum y una invasión marciana cuya novedad era que no eran visibles. Los 32 episodios de sus 2 temporadas apenas alcanzaron para salvar los gastos. Sin embargo la calidad del producto dejó satisfechos a los directivos de ATV. Les pidieron una serie de marionetas para el público infantil mientras pensaban en un proyecto similar al Capitán Escarlata. Anderson y Thamm crearon "Joe 90" pero el proyecto que les interesaba se retrasaba. Finalmente la ITV Televisión se puso los pantalones largos y los contrata con presupuesto ilimitado. La respuesta fue acorde a las expectativas, Anderson y Thamm le regalaron al mundo las maravillosas y revolucionarias series "UFO" y "Cosmos 1999"
Fuente: Pqueñas Piezas de la Historia
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