La portada de éste álbum (1969) esta cargada de referencias a la muerte de Paul. Los cuatro Beatles aparecen en fila, como escenificando un cortejo fúnebre. John Lennon va vestido de blanco: es el predicador, Ringo va de luto, es el amigo del difunto. George Harrison, a su vez, va vestido con un ropa vaquera e informal: es el enterrador. Paul es el único de los cuatro que va descalzo y camina con los ojos cerrados. En muchas culturas orientales, los difuntos son quemados descalzos. Además, su paso está descoordinado respecto al resto de los Beatles, como si no perteneciera a la procesión. Por último, el coche negro aparcado a la derecha, en segundo plano, parece un coche fúnebre.
El resto de detalles son más sutiles, pero claramente reveladores. Hay dos claves que son especialmente importantes. La primera es que Paul está fumando… con la mano derecha. Recordemos que Paul McCartney era zurdo mientras que William Campbell, su supuesto sustituto, era diestro, aunque aprendió a tocar el bajo con la mano izquierda para disimular esta “pequeña” diferencia.
El segundo detalle es la matrícula del coche blanco aparcado en segundo plano, en la que se puede leer “28 IF” (28 SÍ…) 28 años es la edad que tendría Paul McCartney en el momento de la publicación del disco… SI estuviera vivo.
Pero hay algunos detalles interesantes. Sobre la derecha de la imagen se ve a un hombre de pie con saco marrón, pantalón negro, camisa blanca y lentes gruesos. Su nombre era Paul Cole -quien murió a los 96 años, en febrero de 2008- y estaba de vacaciones en Londres con su esposa. Ella quería entrar a un museo, pero él no y prefirió salir a caminar y tomar un poco de aire. Fue así como paseando por el barrio llegó casualmente hasta la puerta de Abbey Road, donde vio que un policía estaba cortando la calle y que cuatro jóvenes caminaban por el paso cebra y que un tipo subido a una escalera les sacaba fotos. La camioneta que está al lado de Cole es una unidad policial. Cole observó la secuencia y no le dio importancia. Media hora después volvió al museo para encontrarse con su esposa. Al día siguiente volvieron a Deerfield Beach, donde vivían en ese momento. Un año más tarde Cole vio la tapa del disco en su propia casa, su esposa estaba aprendiendo a tocar una canción de George Harrison en el piano. No salía de su asombro y le contó la historia a ella y a sus hijos. Tras una razonable incredulidad, fueron en busca de una lupa y disiparon las dudas. Había salido en la carátula del “ABBEY ROAD”.
También esta carátula dio lugar a que se esparcieran aquellos absurdos rumores que hablaban acerca de que Paul había muerto y que había sido suplantado por un doble. Y se estas suposiciones se basaban en el hecho que en el Volkswagen blanco se podía leer en su matrícula LMW 281F, e interpretaban esta placa de la siguiente manera: “LMW” significaba Linda McCartney Waits (Linda McCartney espera) y 28IF, se la interpretaba como 28 if, que en inglés era una referencia a que si Paul viviese tendría 28 años, ya que “if” significa “si” como condicional. Pero hay una cosa muy cierta, si como se decía, en 1966 Paul hubiera muerto, nunca hubiera conocido a Linda Mc Cartney, entonces ¿por qué tendría que esperar Linda a quien nunca conoció? Pero la verdad era otra, ya que ese auto pertenecía a un hombre que vivía en un piso exactamente al lado del estudio. También se llegó a afirmar que Paul había muerto, porque era el único que estaba descalzo, con un cigarro en la mano derecha siendo zurdo y con el paso cambiado. Pero, con respecto a lo de los zapatos, Paul comentó que aquel día hacía calor y que en un momento determinado se los quitó sin más. De hecho, en fotos desechadas de la misma sesión, aparece calzado con unas sandalias.