La compañía produce un concentrado que luego vende a varias empresas embotelladoras licenciadas, las cuales mezclan el concentrado con agua filtrada y edulcorantes para, posteriormente, vender y distribuir la bebida en latas y botellas de plástico o de vidrio en los comercios.
También existen variantes, fabricadas por la misma empresa, como la Coca-Cola Light y la Coca-Cola Diet; otras son la Coca-Cola sin cafeína, Coca-Cola Cereza, Coca-Cola Vainilla, Coca-Cola Zero, entre otras lanzadas especialmente, como la de sabor a limón.
Es la marca más comprada a nivel mundial, y su mayor competidora es Pepsi, también una bebida estadounidense. Entre otras cosas, además del color rojo predominante en sus etiquetas, es reconocida también gracias a su estilizada botella, presentada en el año 1915,2 cuyo diseño sigue siendo de exclusividad para el producto, en casi todas las formas en las que es ofrecido. John Stith Pemberton nacio en Knoxville, Georgia, el 8 de julio de 1831 y murio en Atlanta, Georgia, el 16 de agosto de 1888 fue un farmacéutico estadounidense conocido por patentar la Coca-Cola. En 1885 agregó nueces de cola a una nueva bebida que había creado, esta vez sin alcohol pero con jarabe de azúcar. La fórmula definitiva estuvo lista el 8 de mayo de 1889.
En un primer momento, quería encontrar la cura de los dolores de cabeza y la ansiedad. Pemberton experimentó con la nuez de cola y la coca. La bebida, que combinaba lima, canela, hojas de coca y semillas de arbusto brasileño, fue llamada por algunos como «el elixir médico».
Fue su contador, Frank Robinson, quien le dio el nombre y diseñó el logo y el trazo de la letra original. Además, vendió una parte de The Coca-Cola Company a Asa Griggs Candler y, cuando murió, fue este quien adquirió la compañía por 2300 dólares. De hecho Griggs era yerno de Pemberton, de allí que se le diera la oportunidad de comprar el negocio; Griggs murió en marzo de 1929. Lo cierto es que, como muchos grandes inventores, Pemberton no supo obtener mucha ganancia con su invento. En cambio, con Candler la compañía incrementó las ventas en un 4000% entre 1890 y 1900. La publicidad fue un importante éxito y, a principios del siglo XX, la bebida se vendía por todo Estados Unidos y Canadá, y también empezó a vender el jarabe a compañías embotelladoras independientes.