Ese día, Brasil y Paraguay inauguraron simbólicamente la represa de Itaipú, una de las obras de ingeniería más colosales del siglo XX. Con la apertura de su vertedero lateral, comenzaba a operar la central hidroeléctrica que, aún hoy, ostenta el récord como la mayor generadora de electricidad acumulada del planeta, con más de 103 millones de MWh producidos en un solo año. El proyecto nació con la firma del Acta de Iguazú el 22 de junio de 1966, donde ambos países acordaron estudiar el aprovechamiento del río Paraná en su tramo fronterizo. En 1970, las empresas IECO (EE.UU.) y ELC Electroconsult (Italia) realizaron los estudios técnicos que dieron origen a la Entidad Binacional Itaipú, encargada de ejecutar y administrar la obra. En enero de 1975, comenzó el desvío provisorio del río Paraná, una maniobra de alto impacto ambiental que mantuvo a Argentina informada por sus posibles consecuencias. Con el cauce seco en 1978, se inició la construcción de la represa. El embalse se llenó antes de lo previsto, y el 5 de noviembre de 1982 se realizó la apertura de 14 compuertas, liberando el agua acumulada. Las primeras turbinas entraron en funcionamiento en 1984, y las últimas dos se activaron en 2007, completando las 20 unidades previstas, aunque 2 se reservan para mantenimiento. Aunque es la segunda represa más grande del mundo en tamaño (después de las Tres Gargantas en China), Itaipú lidera en generación eléctrica acumulada. Las indemnizaciones a productores brasileños por la expropiación de tierras generaron una ola de inversiones en Paraguay, dando origen al fenómeno de los “brasiguayos”, una migración rural que transformó el paisaje social y económico del país. #Scroll1982 | #ItaipúEnergíaGigante | #CompuertasQueTransforman | #Brasiguayos | #BinacionalConFuerza #mendozantigua
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