El 3 de Noviembre del 1954, en Niza, Francia, moría una de las figuras centrales del arte moderno, ese día fallecía el pintor Henri Matisse.

Nacido el 31 de Diciembre de 1869, en Le Cateau-Cambrésis, Norte de Francia, en el seno de una familia de comerciantes. A los 18 años se trasladó a París para estudiar leyes mientras se mantenía como administrativo de la corte. En 1889 sufre una apendicitis que lo confina varios meses en cama, su madre, para que se entretenga le llena la habitación de elementos para que pinte. Henri creía estar en el paraíso, decidió dedicarse a las artes e ingresó en la "Académie Julián", hasta que en 1892 se inscribe en la Escuela de Bellas Artes de París. Luego de interminables tardes copiando cuadros en el Louvre encontró su estilo. Embarcado en la corriente impresionista dominante. se dedicó a pintar coloridos y luminosos paisajes de Córcega y la Costa Azul. En 1896 realizó su presentación al público exponiendo cuatro lienzos en la Société Nationale des Beaux Arts. Por largos años se inscribió en el "Divisionismo" definido por la separación de colores en puntos individuales que interactúan ópticamente. En 1904 pinta su trabajo impresionista más importante, Luxe, Calme et Volupté. En 1905 expone "Ventana abierta, Collioure" y "Mujer con sombrero" en el Salón d'Automne provocado un escándalo. A partir de allí hubo un cambio de intenciones, temas cansinos, simples, sin conflictos ni tensiones, formas definidas y colores plenos inundaron su producción. Un viaje al Museo del Pardo y Granada lo dotaron de una influencia oriental, el agregado de arabescos se hiso moneda corriente. Cuando abrazó el estilo Cubista en 1917 encontró su rumbo definitivo produciendo sus obras mas valoradas. Su última gran obra fue la decoración de la capilla del Rosario de las dominicas de Vence.