El 13 de mayo de 1942, en las costas de Miami un submarino alemán hundía al petrolero "Potrero del Llano" provocando que México abandonara su neutralidad y participara activamente en la Segunda Guerra Mundial. (EH)

México estaba mundialmente aislado en los años '30, por la nacionalización del petróleo, el Reino Unido y los EEUU le decretaron un bloqueo económico, la URSS retiró su embajador por dar asilo a León Trotsky y desde que Alemania e Italia iniciaron sus políticas expansionistas, México los condenó en la Liga de las Naciones, por todo esto el país no tenía ningún aliado ayudando a su neutralidad. Pero todo cambió el 13 de mayo de 1942, cuando un submarino alemán U-564 tipo VII C comandado por Reinhard Suhren hundió al petrolero de Pemex "Potrero del Llano" matando a la mitad de su tripulación. La protesta formal y enérgica del gobierno mexicano recibió una rápida respuesta, un nuevo hundimiento, esta vez el del petrolero "Faja de oro", el presidente Manuel Ávila Camacho declaró de inmediato la guerra a los países del eje y confiscó los bienes estatales de Italia, Alemania y Japón en territorio mexicano. EEUU vio la oportunidad de sumar un aliado, interrumpió el bloqueo económico le donó armamento y le ofreció capacitación para sus fuerzas, paralelamente al distenderse la relación entre ambos países, 250 mil mexicanos residentes en los EEUU se sumaron voluntariamente a la US Army. En 1945 el "Escuadrón Aéreo de Pelea 201" compuesto por 25 aviones P47 Thunderbolt, 30 pilotos y 300 técnicos se trasladaron al Pacífico donde pelearon junto al "Grupo 58" de la Fuerza Aérea de los EEUU en la Batalla de Luzón en Las Islas Filipinas.