A las 7:36 del 11 de marzo de 2004, el tren N°21431 ingresó en la estación de Atocha de Madrid, tres bombas explotaron sucesivamente sumiendo la terminal en un caos, antes que la tercera bomba explotara, dos bombas mas explotan en el tren N°21435 en la estación de El Pozo del Tío Raimundo. Simultáneamente una bomba explota en el tren N°21713 en la estación de Santa Eugenia y un minuto después, cuatro bombas explotan en el tren N°17305 en la calle de Téllez, 500 mts antes de entrar en la estación de Atocha. En solo 4 minutos las diez bombas colocadas en mochilas abandonadas destrozaron los vagones y la paz de Madrid, el saldo fue de 193 muertos y 1858 heridos. Rápidamente el grupo TEDAX de la guardia civil española se hizo cargo de inspeccionar otras tres mochilas sospechosas en otros vagones, 2 de ellas tuvieron que ser detonadas, pero la tercera pudo ser desactivada y el explosivo y detonador recuperados para la investigación. A tres días de las elecciones, el saliente gobierno español, en manos de José María Aznar, de manera imprudente y atolondrada le atribuye a ETA el atentado, en sintonía, los candidatos José Luis Rodriguez Zapatero y Mariano Rajoy también acusan al grupo terrorista vasco. Cuando Arnaldo Otegi, dirigente del partido vasco "Batasuna" niega rotundamente que ETA estuviera implicado en el atentado, fue denostado por los medios televisivos alineados con la política, hasta la ONU adhirió a esa especulación. Recién 4 días después con los primeros datos de las mochilas y una camioneta secuestrada se abrió otra línea de investigación, al día siguiente Al Qaeda se adjudica el ataque desnudando la debilidad intelectual de la dirigencia española bajo presión. El 3 de Abril la policía localiza el comando central de los terroristas en Leganés, cuando el Grupo Especial de Operaciones ingresaba al lugar el departamento voló por los aires, los terroristas al verse rodeados se suicidaron haciendo detonar explosivos similares a los utilizados en los atentados.
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