21 de noviembre de 1861: San Martín reposa en Brunoy y devuelve el estandarte de Pizarro al Perú

Once años después de su muerte en Boulogne-sur-Mer, los restos del Libertador José de San Martín fueron trasladados al cementerio de Brunoy, Francia, por decisión de su hija Mercedes y su yerno Mariano Balcarce, quienes mandaron construir un sepulcro digno para su descanso definitivo. La ceremonia reunió a representantes diplomáticos de Argentina, Chile, Perú y otros países latinoamericanos, que participaron del funeral de cuerpo presente en la iglesia parroquial de Brunoy. El acto fue presidido por Mariano Balcarce, quien ofreció unas palabras junto al ministro peruano Pedro Gálvez, en un gesto de unidad continental. Se redactó un acta oficial firmada por todos los asistentes, dejando constancia del homenaje y del cumplimiento de una voluntad testamentaria. En cumplimiento de una cláusula del testamento ológrafo de San Martín, se procedió a la entrega del estandarte de Francisco Pizarro al representante del Perú. San Martín había conservado ese símbolo histórico como propiedad personal, pero dispuso su devolución al Perú como gesto de gratitud por los honores recibidos del Primer Congreso peruano. El acto representó un gesto de reparación histórica, reconociendo el derecho simbólico de los pueblos liberados a sus emblemas fundacionales. San Martín había fallecido en 1850, en el exilio voluntario, sin regresar a América. Su deseo de reposar en tierra francesa fue respetado por su familia hasta que en 1880 sus restos fueron repatriados a Buenos Aires, donde hoy descansan en la Catedral Metropolitana. El episodio de Brunoy refleja la dimensión continental de su legado, y su profundo respeto por la memoria histórica de los pueblos que ayudó a liberar. #SanMartínEnBrunoy #EstandarteDePizarro #TestamentoDelLibertador #FuneralAmericano #MemoriaContinental #PerúArgentinaChile #LegadoDeSanMartín #Brunoy1861 #RestituciónHistórica #HéroeDeTresNaciones #mendozantigua