viernes, 12 de septiembre de 2025

🕰️ Hall principal de la estación cabecera de trenes de Tucumán, 1972: el reloj marcaba despedidas y esperanzas. Argentina


Era 1972, y el lugar vibraba con el murmullo de cientos de pasajeros que aguardaban el llamado en las plataformas: el Estrella del Norte en la 3, el Expreso Buenos Aires–Tucumán en la 2. Cada rostro contaba una historia. Algunos partían con la tristeza de dejar atrás su pueblo y su familia, buscando un futuro más prometedor en la Capital Federal. Otros viajaban con alegría, rumbo a unas vacaciones largamente esperadas. Y muchos regresaban a Buenos Aires con el corazón dividido, tras visitar a sus seres queridos, sabiendo que el trabajo los reclamaba de nuevo. El Estrella del Norte, ícono ferroviario argentino, conectaba Tucumán con Buenos Aires en un viaje de más de 24 horas. Era símbolo de progreso, pero también de migración y sacrificio. El Expreso Buenos Aires–Tucumán, por su parte, ofrecía un servicio más ágil, parte de una red que desde fines del siglo XIX buscaba unir el país por rieles. Ambos trenes fueron protagonistas de la vida cotidiana y de grandes episodios históricos. El Estrella del Norte, por ejemplo, estuvo involucrado en la mayor tragedia ferroviaria del país en 1970, cuando colisionó con otra formación cerca de Benavídez. La arquitectura del hall, con sus grandes ventanales y el reloj central, era testigo silencioso de abrazos, lágrimas y promesas. En los kioscos, los carteles de Coca-Cola y Bosco La Maris completaban la escena urbana de una Argentina que se movía entre lo popular y lo moderno. #EstaciónTucumán #TrenesDelAyer #MemoriaFerroviaria #ViajesConHistoria #DespedidasYEncuentros #RelojIcónico #MigraciónInterior #ArgentinaEnMovimiento #PatrimonioVivo #HistoriasDeAndén #Mendozantigua

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